Vecinos y comerciantes reclamaron la desaparición del coche de la calle Orzán y los estudios municipales avalaron esta tesis, por lo que la conclusión era fácil. El Ayuntamiento confirma la peatonalización de la vías interiores de la manzana comprendida entre San Andrés, Cordelería, Rúa Alta y plaza de la Cormelana, es decir, que este tramo de Orzán, además de Vista, Mariñas, Picos y perpendiculares quedan para el uso y disfrute de los ciudadanos.

El Ayuntamiento aseguró hace una semana que era "viable" la peatonalización del tramo de la calle Orzán y que se analizaba la posibilidad de extender la medida a puntos adyacentes, tal y como adelantó LA OPINIÓN. Falta por definir la dirección de las calles, el horario de carga y descarga -en principio, de 6.00 a 11.00 horas, como en zonas ya peatonalizadas de la ciudad, como calle Real y A Gaiteira- y si las plazas de aparcamiento eliminadas se reubican en otros lugares del barrio.

La peatonalización en la calle Orzán ya existe en la actualidad, aunque de forma provisional, con las vallas de obra. La previsión de la Concejalía de Rehabilitación es que sea oficial a partir del próximo 18 de mayo, una vez el Concello adquiera los paneles con las horas de carga y descarga y las señales de acceso y salida del barrio, que estarán en el cruce de la calle Orzán con Rúa Alta y en Cordelería con travesía de Cordelería. En principio, el Ayuntamiento confiará en el "civismo" de los conductores para respetar las señales y en los controles por parte de las patrullas de la Policía Local para no recurrir así a la colocación de bolardos móviles y lectores de matrículas.

Comerciantes y vecinos aprovecharon la visita del alcalde, Javier Losada, y del responsable de Rehabilitación para proponer que las calles de la zona que se renuevan queden peatonales. El Ayuntamiento se comprometió a estudiar la posibilidad y López Rico admitió ayer que el proyecto será un incentivo para la "potenciación" del comercio en el barrio, "en la parte trasera de Pescadería".

El Gobierno local confió en que la peatonalización de las calles, unido a una "demanda de bajos en alquiler", con unos "precios más asequibles", y su cercanía al centro, permitirá crear nuevos negocios, lo que el concejal de Rehabilitación calificó de "hostelería desenfadada" y "modernidad alternativa".

La peatonalización del tramo de la calle Orzán -entre Rúa Alta y plaza de Pontevedra- y vías próximas es la primera conclusión del estudio encargado a una empresa especializada. Será ahora cuando la Concejalía de Tráfico acabe de definir el proyecto. Por ejemplo, las direcciones de las calles para los coches que puedan acceder al interior de la zona peatonal y el horario de carga y descarga, aunque en este último caso lo más probable es que se mantenga la pauta seguida en la calle Real o en A Gaiteira, es decir, de seis a once de la mañana.

Los únicos vehículos que podrán acceder durante las 24 horas del día a la zona peatonal -al margen del horario establecido para las furgonetas de carga y descarga- serán los de los conductores con plaza de garaje, los automóviles y taxis adaptados para recoger a vecinos con movilidad reducida, y servicios habituales que se ofrecen en el resto de la ciudad, como la recogida de basura o la limpieza viaria.

El concejal de Rehabilitación destacó que se mantendrán las dos plazas de minusválidos que en la actualidad existen en estas calles y travesías que se peatonalizan, pero que desaparecerán otras 18 destinadas a residentes. Falta por determinar si estos aparcamientos se ubicarán en otros lugares de Pescadería, pues el estudio encargado por el Ayuntamiento ocupa un área más grande: todo San Andrés -desde Juana de Vega hasta la estrecha de San Andrés y San Nicolás- y todas las vías paralelas y perpendiculares delimitadas por Corralón, Juan Canalejo y Orzán, por un lado, y Durán Loriga y Cantón Grande, por el otro. El Concello decidirá ahora si el proyecto de peatonalización es o no más ambicioso.