El Ministerio de Fomento descarta la ampliación de la AP-9 hasta que no se construya el cuarto carril en Alfonso Molina, un proyecto que todavía está en estudio. Es decir, que el proyecto para mejorar los accesos a la ciudad deberán esperar, y sin fecha para su ejecución. El Gobierno también condiciona esta infraestructura a la entrada en funcionamiento de la carretera que unirá la autovía A-6 con Lonzas y la tercera ronda. Para el PP, los argumentos utilizados desde Madrid evidencian que el desdoblamiento de la autopista es una de las "primeras obras" que se verán afectadas por los recortes presupuestarios.

La ampliación a cuatro carriles en Alfonso Molina, tanto en dirección entrada como salida, es una "actuación previa" a la construcción del tercer carril de la AP-9 en los accesos a la ciudad de A Coruña. Esa es la respuesta que dio Fomento a una pregunta del Partido Popular en la que solicitaba que le explicasen los motivos por los cuales se retrasa el proyecto. El problema es que el plan para aumentar la capacidad de Alfonso Molina, entre Ponte da Pedra y las conexiones con la autopista, se encuentra aún en estudio, sin fecha para su ejecución, lo que implica que tampoco existen plazos para la ampliación de la AP-9.

Fomento, tal y como informó LA OPINIÓN a principios de mes, condicionó el proyecto de la autopista al funcionamiento del tramo estatal de la tercera ronda, cuya apertura se prevé para 2012. El departamento que dirige José Blanco utiliza ahora de nuevo este argumento para justificar el estado actual de la ampliación de la autopista. "Esta nueva autovía (en referencia a la tercera ronda) supondrá el primer acceso libre de peaje a la ciudad de A Coruña y su aeropuerto de Alvedro, siendo una clara alternativa a la avenida de Alfonso Molina y por lo tanto aliviará la actual situación de congestión de dicho vial", presumieron desde Fomento para justificar el estado del proyecto de la autopista.

La portavoz municipal del PSOE y diputada en el Congreso, Carmen Marón, ya supeditó hace dos semanas la ampliación de la AP-9 al funcionamiento de la tercera ronda, una actuación reclamada tras el anuncio de Fomento de mejorar los accesos a Vigo y Santiago. Según explicó la edil, los técnicos realizarán un estudio para determinar cuál es el mejor proyecto para el desdoblamiento de la autopista, aunque siempre condicionado a la entrada en funcionamiento de la carretera de circunvalación, que conectará la autovía A-6, a la altura de Ledoño, con Lonzas y con los tramos de la tercera ronda que construye la Xunta a través de la Consellería de Infraestruturas.

Las explicaciones de Fomento no han servido para apaciguar los ánimos del PP. Según Belén do Campo, diputada por A Coruña, la contestación ministerial reafirma sus teorías de que la ampliación de la AP-9 en la avenida de Alfonso Molina no es una obra prioritaria para el Ejecutivo español y que será "una de las primeras" que se verá "afectada" por los "recortes".

"Es lamentable que el Gobierno utilice como excusa que se está construyendo la tercera ronda, porque los compromisos relativos a mejorar la movilidad de los coruñeses son urgentes y deberían ser prioritarios", destacó la diputada del PP.

Belén do Campo aprovechó la coyuntura, no sólo para atacar al Ministerio de Fomento, sino también para cargar contra el alcalde: "Javier Losada tiene que explicar a los coruñeses por qué permite que su gobierno amigo de Madrid paralice una obra, comprometida por el propio Zapatero hace dos años, y que supondría un alivio para los colapsos de tráfico que padecen a diario los coruñeses".