La propietaria del quiosco de la plaza de España llegó a un acuerdo útil para poder vender los periódicos mientras ejecutan las obras de la zona donde tiene instalado su negocio. Así, estos días se podía ver a la mujer vendiendo sus productos dentro de un contenedor de obra. Algunos de los clientes y vecinos que pasaban por allí se quedaban mirando el nuevo quiosco con asombro, mientras otros, ya acostumbrados, se dirigían sin pensarlo al interior del contenedor para comprar los periódicos y revistas. En cuanto concluyan las obras de pavimentación y reforma de la plaza de España la propietaria del quiosco volverá a su lugar habitual.