El portavoz parlamentario de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, tuvo que interrumpir su visita a Penamoa en cuanto se asomó a la entrada del poblado. Los residentes en el asentamiento no dudaron en lanzar piedras, palos de hierro, sillas y huevos contra el grupo de extraños que los observaba desde lejos. Entre los visitantes, además de Llamazares y el candidato de Esquerda Unida a la Alcaldía de A Coruña, César Santiso, se encontraban miembros de la plataforma de O Ventorrillo que solicitan el desmantelamiento de Penamoa.
"¡Hace una semana que no comen, eh!", dijo un chabolista que portaba un palo en la mano al grupo de desconocidos que corría para evitar las pedradas. El joven sonreía mientras veía cómo sus vecinos echaban a los visitantes. "La próxima vez tenéis que venir con casco", exclamó. Llamazares fue el primero en abandonar las cercanías del poblado en cuanto comenzaron a caer piedras, huevos y palos de hierro. "Si nos da, nos quedamos en el sitio, ¡vámonos!", ordenaba uno de los miembros de la plataforma creada en O Ventorrillo contra el tráfico de drogas.
"No me esperaba otra cosa", dijo el dirigente de Izquierda Unida tras abandonar Penamoa caminando y refugiarse en O Ventorrillo. "El recibimiento demuestra que hay un problema social grave que se ve en ese entorno tan degradado, tanto para ellos como para el resto de ciudadanos. Hay un problema de convivencia y de seguridad en el barrio que las administraciones tienen que solucionar", subrayó Llamazares, quien acusó al Ayuntamiento de "eludir" su responsabilidad para desmantelar el asentamiento. "Es mucho decir que la solución es solo judicial. Hay también una solución política", recalcó el dirigente de Izquierda Unida.
El candidato de la formación política a la Alcaldía, César Santiso, advirtió de que el Ayuntamiento habla "mucho" y de que la realidad "nada tiene que ver con lo que dice". Santiso propone al Concello que escuche los proyectos de algunas ONG especializadas en el realojo de chabolistas. "El plan de integración que lleva a cabo es insuficiente porque con darles una vivienda no llega. Tiene que ser mucho más completo. No hay intención política de solventar la situación", destacó Santiso, que prometió trabajar "desde el primer día" en el problema de Penamoa si logra formar parte del Gobierno municipal tras las elecciones del próximo 22 de mayo.
Los miembros de Izquierda Unida también reprocharon al Ejecutivo local que no haya recogido el material tóxico de algunas de las chabolas que ordenó demoler. De hecho, entre las barracas que quedan en el asentamiento se amontonan uralitas. "Los residuos que tienen un impacto ambiental deben de ser retirados", indicó Llamazares.
El portavoz parlamentario de Izquierda Unida aprovechó su visita a la ciudad para pedir a los coruñeses que confíen en su partido como alternativa al PSOE y PP. "Son las elecciones de la crisis y nosotros proponemos una salida de la crisis social y solidaria", señaló Llamazares. El candidato a la Alcaldía de Izquierda Unida anunció que su programa electoral se centra en la participación de los vecinos de A Coruña. "La política del Ayuntamiento está basada en crispación e insultos permanentes. Pretendemos transformar este tipo de política con ética, transparencia y coherencia", subrayó Santiso.
