Dos de las deficiencias que tiene el edificio Conde de Fenosa y por las que los tribunales anularon su licencia y abocaron a la demolición fueron autorizadas en su día por el Ayuntamiento de A Coruña. La comisión de gobierno de noviembre de 1999 dio permiso a Martinsa-Fadesa para reducir el número de plazas de garaje de 72 (que ya incumplía el estándar mínimo) a 67; y también para aumentar la superficie construida en 2.473 metros cuadrados más de lo proyectado.

Martinsa-Fadesa redujo el número de garajes para ganar espacio para ubicar los trasteros y el Ayuntamiento no sólo lo permitió sino que también dio luz verde a que Fadesa ubicase 28 plazas de aparcamiento en un edificio colindante, en el número 17-19 de Alfredo Vicente donde existe una servidumbre de paso (se comunican los dos por el subsuelo). En aquel momento estaba vigente el Plan General de Ordenación Municipal de 1998 (igual que ahora), que prohibía expresamente computar plazas en "aparcamientos exteriores a la parcela", según figura en su artículo 6.6.6.2.

El Gobierno local actual acaba de solicitar a Fadesa que presente un proyecto refundido para tratar de subsanar las deficiencias que dieron origen a la anulación de la licencia, entre ellas el del número mínimo de plazas de garaje. Por eso solicitó a la comunidad de propietarios que presentase documentos que probasen que existían las plazas mínimas que exige la legislación.

Acaba de caducar el período de suspensión de licencias derivada por la aprobación inicial del nuevo plan general por lo que ahora está vigente el PGOM del 98, este plan que prohibe situar plazas fuera del edificio. Desde ayer el Concello ya puede otorgar licencias para este inmueble, en caso de que así lo solicitase Fadesa con un proyecto para legalizarlo. Como ahora mismo está en vigor el plan general de 1998, para el edificio Conde de Fenosa se mantiene la norma zonal 1 grado 2 de conservación de la edificación.

Esta ordenanza autoriza obras de reestructuración general pero le aplica los criterios de obra nueva y según la normativa del plan general urbano la nueva edificación "deberá ceñirse al volumen envolvente del edificio sustituido" o bien, mediante un estudio de detalle, hacer una reordenación pero sin "superar la superficie edificada total del edificio sustituido".

Es decir, que con el plan general urbano del 98 en la mano se podría intentar legalizar este edificio pero no ampararía los 2.473 metros cuadrados de aumento de superficie construida que se autorizaron en 1997 (según figura en el informe técnico del entonces arquitecto municipal) porque la normativa prohibe aumentar la superficie edificada y también impide la reestructuración en más del 50% del inmueble y en el caso del Conde de Fenosa se hizo una reestructuración de la práctica totalidad del edificio original.

El Concello podría, con el plan del 98, legalizar el 50% del edificio demoliendo lo que se construyó a mayores como el bajo cubierta (donde están los dúplex), reestructurando el sótano para cumplir la dotación mínima de garajes) y ampliando los patios. La otra opción es demoler todo lo que se hizo en la rehabilitación integral lo que dejaría al edificio con sólo la estructura.

El Gobierno local evitó pronunciarse ayer directamente sobre la petición del denunciante del edificio Fenosa, que ha solicitado al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que imponga multas coercitivas al regidor (a pagar de su bolsillo) por no cumplir la sentencia judicial, además de solicitar que se inicie el proceso para "exigir la responsabilidad penal que pudiera corresponder".

El grupo de Gobierno, en un comunicado enviado ayer, se refiere solo al hecho de que el director de Urbanismo ha solicitado a Martinsa-Fadesa que presente un proyecto refundido que incluya las "los trabajos o acciones que son necesarios" para "reponer la legalidad urbanística en el edificio". En este escrito, Urbanismo cita tres de los cuatro motivos por los que los magistrados reiteradamente han confirmado el derribo del inmueble pero se olvida del principal, y es que en un edificio que está fuera de ordenación no se puede autorizar una rehabilitación integral por lo que se otorgó una licencia ilegal.

Tanto el Tribunal Superior de Galicia como el Supremo ya confirmaron en distintas resoluciones que los sucesivos recursos y propuestas no legalizaban el inmueble porque subsistía esta causa fundamental de la ilegalidad.

El Ejecutivo coruñés asegura que "centra todos sus esfuerzos en solucionar un problema heredado" y por eso desde "el primer día" que entró en la Alcaldía no han "perdido ni un minuto" de tiempo para estudiar el problema.

El Ejecutivo municipal añade que "el departamento de Urbanismo trabaja en el expediente de reposición de la legalidad urbanística" (aunque los magistrados lo que reclaman es la ejecución de la sentencia). Añade no obstante que este proceso "tiene sus plazos y sus períodos de garantía".

El Concello finalmente destaca en su comunicado que "se han dado todos los pasos necesarios para que exista la mayor seguridad jurídica" posible respecto a este inmueble denominado Conde de Fenosa.