Los representantes de la asociación de vecinos A Gaiteira, Os Castros y Oza entregaron ayer en el Concello sus alegaciones a los presupuestos del año que viene. Se quejan de que su barrio está "marginado", por lo que reclaman que el documento definitivo incluya partidas presupuestarias para cumplir algunas de las promesas que el Partido Popular les hizo durante la campaña electoral. "Tenemos muchos desperfectos; el alcantarillado, el alumbrado de la calle de A Gaiteira, que se corta todo el tiempo y la escuela infantil", explicó ayer el presidente de la asociación, Paulo Sexto.

Demandan para su barrio "las mismas inversiones que para los del centro de la ciudad" y es que consideran que Os Castros se ha visto excluido de los presupuestos por estar lejos del edificio del Palacio Municipal.

Se quejan de que el Partido Popular, en campaña electoral, les prometió que acometería obras de renovación integral de la calle peatonal de A Gaiteira y que renovaría el alumbrado público y hasta que construiría una escuela infantil pública para darle servicio al barrio si llegaba a María Pita, pero que nada de esto se cumplirá, al menos no durante el próximo año, ya que los presupuestos no recogen ninguna partida para hacerlo.

Echan de menos también que el Gobierno local les consulte sus deficiencias y que se preocupe por las cosas que pasan en el tejido asociativo del barrio.

"Hay asociaciones a las que el Ayuntamiento les cede locales o que les da una subvención para que hagan actividades. A nosotros no nos dan nada y estamos buscando la manera de autofinanciarnos", explicó ayer uno de los vocales de la asociación, Eduardo Freire.

Tienen muchas propuestas para la zona, una de ellas es recuperar todo lo que queda en pie del antiguo Concello de Oza, pero también grandes cambios, como construir una residencia para los mayores del barrio, hacer de un solo sentido la avenida General Sanjurjo, la eliminación de algunos de los semáforos del barrio, la instalación de juegos infantiles, mesas y bancos en el espacio que está frente a la guardería Carricanta y la reordenación del tráfico en la calle de la Merced y en Antonio Ríos.

Los vecinos de Os Castros exigen también algunas modificaciones que no supondrían grandes partidas de dinero en los presupuestos municipales, como que se retrase la salida de la línea 17 de Monte Alto hasta las once y diez de la noche para que los alumnos del instituto Ánxel Casal, que salen a las diez y media, puedan volver al barrio en autobús.