El centro de la ciudad concentrará la mayor parte de las obras incluidas en el plan de accesibilidad municipal. De los 260 proyectos, 187 están ubicados en la Ciudad Vieja y en Pescadería, mientras que los barrios de Os Castros, A Gaiteira, O Castrillón y Os Rosales también tendrán mejoras centradas en la movilidad de los peatones. La Concejalía de Infraestructuras sacó a concurso esta parte del plan, que requerirá un presupuesto máximo de 497.000 euros. Las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas hasta el próximo día 17.

Las obras se centrarán en la ampliación de aceras, la eliminación de elementos urbanos que obstaculicen el movimiento de los ciudadanos, la supresión de escalones en zonas peatonales, la mejora de cotas y pendientes y la eliminación y creación de nuevos vados y pasos de peatones. El desarrollo de los trabajos no afectará a la circulación de vehículos ni al tránsito de los coruñeses en ninguna de las zonas afectadas.

Según el pliego de condiciones del concurso, las obras han sido demandadas en su mayor parte por los vecinos y, añade, aunque son "pequeñas obras", para los ciudadanos suponen "grandes mejoras para su entorno". Los técnicos pretenden que este tipo de actuaciones "permitan, poco a poco, hacer de A Coruña una ciudad completamente accesible". Esta primera fase del plan se extenderá, desde que arranquen las obras, durante seis meses.

De las más de 200 obras, las más complejas se concentran en Os Castros, como la que se realizará en el entorno de la iglesia de Oza, donde se levantará la altura de la acera y se eliminarán los escalones que llevan al recinto religioso. Los operarios talarán cinco árboles que impiden el paso a los peatones y moverán un poste del tendido eléctrico. Un trabajo similar se realizará en el acceso al polideportivo Monte das Moas, en la calle José María Hernánsaez de O Castrillón. En la avenida de Monelos se eliminarán unos escalones en las zonas de las torres 1 y 2 y se construirán unas rampas para las aceras para que sea más fácil circular por ellas.