Dos años de cárcel. Esa es la pena que demanda el representante del Ministerio público para un hombre acusado de abusar de la hija de uno de sus amigos. El fiscal relata en su informe que el procesado se ofreció a llevar a la niña, que cuando sucedieron los hechos, en octubre de 2011, tenía 15 años a una verbena, ya que su padre estaba trabajando en un bar de su propiedad.

El familiar de la adolescente accedió a que su cliente trasladase a la menor a la fiesta y, cuando llegaron allí, el acusado aparcó el vehículo de tal forma que la víctima no podía abrir la puerta. La Fiscalía sostiene que el imputado le realizó tocamientos a la niña. El sospechoso la dejó escapar cuando se percató de que intentaba coger el teléfono móvil para llamar a su padre. "Cuando la soltó, le dijo que no dijese nada", señala el fiscal en su informe sobre los hechos.