El Gobierno local ha rectificado y mientras en el PGOM aprobado el pasado agosto hacía como que no existía la afección de la refinería al obviar un dictamen que había encargado y que alertaba de las limitaciones a causa del Plan de Emergencias Exterior de A Grela Bens, en el plan que irá la próxima semana a pleno incorpora ya el dictamen como anexo y reconoce, como publicó LA OPINIÓN, que existen importantes desarrollos urbanísticos condicionados por la servidumbre de esta petroquímica. El nuevo PGOM señala que la afección de la refinería, "en su escenario menos posibilista", implicaría "la imposibilidad de implantar nuevos usos residenciales, terciarios, comerciales, equipamientos (...)". Ahora se asume que es necesario realizar un Análisis Cuantitativo de Riesgos antes de ejecutar varios urbanizables (Penamoa, O Portiño, As Rañas...). Y no sólo urbanizaciones, también el 29% del total de los espacios libres previstos en el plan urbano están dentro de la zona de intervención de la refinería (un millón de metros cuadrados).

Los costes derivados de la ejecución de los proyectos incluidos en el plan general se reducen un 5%, como había avanzado el redactor del documento, Joan Busquets, a LA OPINIÓN, con el argumento de que la nueva situación económica exige este cambio. De los 561,7 millones de euros estimados en julio se pasa a los 533,58 millones que figuran en la nueva versión. La previsión de gasto no implica compromiso económico de las administraciones.