El enfrentamiento entre Albada y el comité de empresa de la concesionaria de la planta de Nostián por la negociación del convenio deparó ayer un nuevo episodio de desacuerdo que anticipa la inminente petición del arbitraje vinculante por parte de los representantes de la plantilla. Lo harán hoy, y solicitarán la readmisión de nueve de los once trabajadores que han sido despedidos como condición única para negociar con la empresa un cambio en las condiciones laborales que ésta propone, entre ellas rebajas salariales y un aumento de la jornada de trabajo.

Con arbitraje ya no habrá mediación, sino el pronunciamiento de un árbitro, un juez, que dictará un fallo inapelable. A ello se acoge el comité, que ayer solicitó además un acta de la reunión, actitud que provocó el rechazo de la empresa. "Sirvió para justificar mediáticamente la petición del arbitraje", señaló un portavoz de Albada.

Las partes volvieron a reunirse con el mediador, el Comité Galego de Relacións Laborais (AGA), pero tras una hora escasa de conversaciones no se llegó a ninguna postura común. "Asistimos a un paripé, a una reunión que solo pidieron ellos y en la que mostraron que no tienen voluntad de negociar ni presentaron propuestas alternativas", manifestó la misma fuente de Albada. La firma concesionaria reitera que no admite en ningún modo la readmisión de los despedidos y mantiene su intención de congelar los salarios y negociar con la plantilla la redistribución de las vacaciones y el horario laboral.

Tras un nuevo choque en un conflicto que dura desde marzo, los sindicatos informaron ayer al mediador de que pretenden pedir el concurso de un árbitro. La solicitud será presentada por escrito hoy, aseguró a este periódico el presidente del comité de empresa, Xosé Manuel Vilariño. Reclamarán la readmisión de los nueve despedidos. El AGA preguntará después a Albada si acepta el arbitraje. La empresa descarta cualquier negociación si concierne a los despidos.

Vilariño atacó de nuevo a la dirección de Albada por "burlarse de los coruñeses y del Concello por no realizar un servicio por el que cobran a los ciudadanos".