"El futuro hay que cosecharlo", sentenció ayer Carlos Negreira. Y del futuro de la ciudad, de A Coruña de los próximos años, expuso el alcalde sus trazos más sobresalientes, resumidos en un decálogo que compartió con los 200 asistentes a un desayuno organizado por el Fórum Europa Tribuna Galicia en el Hotel Hesperia Finisterre. Negreira escapa de lo que llama "ciudades dinosaurio", aquellas urbes que no innovan ni progresan; tampoco es partidario de una ciudad-estado que no colabora con los núcleos de población limítrofes; y sobre todo defiende un proyecto de ciudad que basa en la cultura, la ciencia, el empleo, los barrios o la cooperación su estrategia de desarrollo.

Después de ser presentado por la por la psicóloga y escritora María Jesús Álava, Negreira invirtió casi una hora en perfilar las líneas de actuación actuales y venideras de su Ejecutivo, los planes en marcha o en espera con los que tratar de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Es el contenido del proyecto Coruña Futura presentado en ocasiones anteriores, y que ayer vivió una etapa de exposición más antes de empezar a tomar forma, y al que acompañó un repaso de las iniciativas ya emprendidas por el Ayuntamiento.

El alcalde sueña con una ciudad que haga del talento y de la innovación su fórmula de progreso y bienestar. Negreira aconsejó tener presente el patrimonio coruñés para impulsar sus futuros proyectos, entre los que incluyó ideas tan ambiciosas (y criticadas) como el túnel de O Parrote y La Marina -cuya finalización conjunta situó en enero de 2015- y la conexión entre el embalse de Cecebre y el lago artificial de Meirama en el área metropolitana. También citó propuestas más cercanas como el plan de ascensores, el funcionamiento de la policía de barrio, políticas de empleo y el apoyo al comercio local.

El regidor coruñés recalcó el compromiso medioambiental de su Gobierno en ámbitos como el tratamiento de la basura y la depuradora de Bens y subrayó la etiqueta que atribuye a A Coruña como "ciudad de servicios sociales", por lo que aludió a los planes de ayuda al ciudadano, al potencial sanitario y a la importancia de la Universidad como factores de evolución. "Las empresas que progresan son las que representan un valor seguro", incidió Carlos Negreira para oponerse al inmovilismo de esas "ciudades dinosaurio".

En el turno de preguntas, moderado por la directora de LA OPINIÓN, Carmen Merelas, un concejal del PP en Oleiros pidió al alcalde una valoración sobre la posibilidad de que A Coruña se fusione con otros concellos limítrofes. Negreira calificó de "mejorable" la reestructuración de municipios y evitó aludir a futuras uniones, aunque pidió "cooperar entre todos los concellos" para arreglar los problemas de la comarca. Defendió a ultranza el proyecto O Parrote-La Marina, del que dijo que "no es ningún despilfarro".