Es como punta Langosteira pero a escala y a cubierto. Y, aunque parezca una piscina con un trozo de muelle de colores dentro, sirve para recrear temporales y para ver cómo se comportarían el morro y el tronco de la segunda fase del contradique del puerto exterior si se construye siguiendo el proyecto de la Autoridad Portuaria.

Dice el coordinador del Grupo de Ingeniería del Agua y del Medio Ambiente (Geama), Enrique Peña, que, por ahora -el estudio finalizará en diciembre-, no se han encontrado deficiencias importantes que provoquen un cambio "de gran calado" en este proyecto.

En la piscina del Centro de Innovación y Energía Civil (Citeec), donde se realizan los ensayos, se recrean a escala olas de una altura máxima de seis metros, que equivalen a olas de 15,2 metros en la parte exterior del dique. Y es que cuando el mar impacte contra esta parte del contradique, que todavía está sin construir, su fuerza se habrá amortiguado ya porque, primero, habrá chocado contra el dique.

Este estudio no implica que el modelo testado por este grupo de investigación de la Universidade da Coruña, sea el que, finalmente, se va a construir, sino que se limita a analizar la propuesta de la Autoridad Portuaria para, en el futuro, redactar las bases de la licitación, que se publicarán "a mediados de 2014" con un presupuesto máximo de 47,5 millones de euros y un plazo de ejecución de dos años.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, explicó ayer que, saber el comportamiento del mar en el contradique permitirá optimizar los requerimientos técnicos y "el coste de ejecución" y es que, cuanto más alto sea el tronco del contradique más seguro será, aunque también más caro. El objetivo es encontrar el equilibrio, a pesar de que la puerta está abierta a adjudicarle la construcción de la obra a la empresa que cumpla con los requisitos exigidos, aunque utilice un sistema diferente de ejecución si, de ese modo, se rebajan los costes.

La propuesta de la Autoridad Portuaria para continuar los 450 metros de estructura que hay en la actualidad contempla la utilización de 9.000 bloques de 25 toneladas para el cuerpo del contradique y de 4.000 bloques de 50 toneladas para el morro, que es la zona que más sufre los envites del oleaje en esta segunda fase.

Tras esta ampliación, quedará por construir el codo del contradique y otra parte de tronco hasta alcanzar los 1.320 metros de infraestructura totales que contempla el proyecto inicial.

"Hasta ahora no ha habido ningún rebose relevante, solo salpicaduras, con las que ya contábamos", explica el coordinador del proyecto, que tendrá los primeros resultados del estudio a finales de mes.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, aseguró ayer que no tenía novedades del Ministerio de Fomento para ejecutar la conexión ferroviaria con el puerto exterior, una infraestructura imprescindible para que la dársena pueda funcionar a pleno rendimiento.

Sobre la integración del Concello de Arteixo en el consejo de administración del Puerto -en detrimento, posiblemente, de un integrante del Ayuntamiento de A Coruña o de la Xunta- no sabe nada todavía el presidente de la entidad. Y es que la Consellería do Mar todavía no le ha comunicado quién pasará a formar parte del consejo, tal y como exige la ley, y quién dejará de tener voz y voto en las reuniones del ente portuario.

El proyecto de dragado de la ría de O Burgo que ha presentado el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) plantea la posibilidad de utilizar los lodos extraídos de la ría de O Burgo como base para el puerto exterior, una propuesta de la que, el presidente de la Autoridad Portuaria, aseguró "no estar al tanto".