La asociación cultural universitaria Hercle organizó ayer por la tarde en el estadio de Elviña una jornada para promocionar el béisbol y el jugger entre los universitarios, dos deportes de equipo minoritarios pero que cuentan con una comunidad de seguidores en A Coruña. La actividad se realizó con la ayuda del Druidas Béisbol Club y la Asociación Coruñesa de Jugger.

Al jugger, inspirado en la película posapocalíptica Sangre de Héroes, juegan unas cien personas en A Coruña, y, según explica el vicepresidente de Hercle, Isidro Alfaro, han organizado una liga en la que participan equipos de Lugo, Ferrol, Vigo y Santiago y que entrena y organiza partidos los domingos. La ciudad fue también la entrada del jugger en Galicia, donde lo introdujo desde Alemania hace pocos años un joven conocido como Lebor.

La mayoría de los jugadores coruñeses, explica Alfaro, tienen "entre 18 y 20 años" y su número "está subiendo bastante, pues es un deporte muy atractivo y espectacular de ver". Ahora se está intentando aumentar la media de edad atrayendo al público universitario. Con este objetivo, Hercle organizará un torneo el próximo 27 de junio.

El jugger se practica en dos grupos de cinco jugadores y combina elementos del rugby, pues hay un corredor encargado de anotar puntos introduciendo un marcador, el jugg, en la zona enemiga, y de la esgrima, pues el resto de los jugadores están equipados con armas cubiertas por materiales blandos y pueden dejar temporalmente fuera del juego a sus rivales golpeándolos con ellas. El equipo "es muy barato", según el vicepresidente de Hercle, que explica que las armas se pueden hacer mediante bambú, corchopán y cinta americana y que por cinco euros se puede tener lo necesario para una persona.

Hombres y mujeres compiten en la misma liga y, pese a los golpes que se intercambian entre ellos los jugadores, el riesgo es "como el fútbol, como el baloncesto", pero las lesiones "no son lo normal" y derivan, en general, de que sus practicantes "no somos deportistas, la mayoría".