El alcalde, Xulio Ferreiro, informó ayer de que el anterior Gobierno local no dejó elaborado ningún proyecto para reformar el mercado municipal de Santa Lucía, pese a que la concesión de la empresa que lo explotaba termina el próximo lunes y se preveía expulsar a los placeros.

Miembros del Ejecutivo municipal se entrevistaron el pasado martes con los vendedores, que realizaron protestas en los últimos meses para reclamar su permanencia en el recinto tras la reforma, a quienes se les comunicó que se les permitirá continuar en el edificio y de los que Ferreiro dijo que durante meses "se les informó de una situación que no era real".

También destacó el alcalde que en su entrevista con el presidente de la Xunta se le explicó que no existe un acuerdo con el Sergas para instalar un centro de salud en el mercado, como había anunciado el Gobierno local del Partido Popular, sino simplemente un protocolo que expresa esta intención entre las dos partes.