El PP alega que los trámites internacionales "complicaron" la contratación para el concierto que ofreció Sting en el Coliseum el 14 de julio e impidieron al Gobierno local anterior dejarlo cerrado antes de las elecciones, a partir de las que el exalcalde, Carlos Negreira, dio la orden a su equipo de no rubricar ningún contrato más. Un informe de Intervención, firmado el mismo día del concierto y al que tuvo acceso este periódico, instaba a su suspensión. El traspaso de poderes dejó sin sellar el acuerdo ni aprobar el precio de las entradas pese a que se habían puesto a la venta más de medio año antes. El espectáculo se pudo celebrar después de que el nuevo alcalde firmase un decreto para permitirlo sobre la campana.

El concejal popular Miguel Lorenzo acusó al actual Ejecutivo local de dejar "para el último día" el cierre de la actuación. "Durante el traspaso de poderes, un mes antes del concierto, se avisó al actual Gobierno de los problemas que había con el concierto debido a los trámites internacionales, que son diferentes a los nacionales", aseveró el edil, "tuvieron un mes para solucionar el tema y no lo hicieron".

El Ejecutivo de Carlos Negreira dejó sin firmar el contrato y sin aprobar el precio de las entradas del recital que había anunciado en diciembre de 2014, por lo que Intervención, el mismo día de la celebración del espectáculo, instó a suspender el concierto, al que asistieron más de 8.000 personas. Un decreto de Alcaldía permitió seguir adelante in extremis con la actuación.

El concejal de Culturas e Deporte, José Manuel Sande, recalcó ayer que el concierto fue "heredado" del anterior Ejecutivo. "El expediente de contratación y la gestión fue realizada por el Gobierno del PP. Nosotros nos limitamos a, de alguna manera, legalizar ese contrato, ya que era algo que afectaba, más allá de las propias obligaciones económicas, al propio Concello", destacó. El edil también subrayó que el concierto fue anunciado por el PP en diciembre. "Se llevaron a cabo numerosas reuniones del Consejo Rector del IMCE con el anterior Gobierno. En el momento del levantamiento de los reparos al espectáculo no había un Consejo Rector constituido debido a una situación de bloqueo político", aseveró Sande.

El informe del interventor, al que tuvo acceso este periódico, está firmado el mismo 14 de julio, día del espectáculo. En su dictamen, el órgano fiscalizador recuerda que el precio de las entradas y el contrato tendrían que haber sido aprobados por el Consejo Rector del IMCE, en ese momento sin constituir. Intervención destaca que es algo que tendría que haberse resuelto cuando se pusieron a la venta las entradas, siete meses antes. En diciembre de 2014, la exedil de Cultura Ana Fernández, del Partido Popular, anunció la cita en el Coliseum en una rueda de prensa.

El mismo día se inició la comercialización de los billetes, con precios entre los 45 y los 70 euros. Desde entonces, según recoge la página web municipal, el Consejo Rector del IMCE, bajo el mandato del Partido Popular, se reunió una vez en diciembre, dos enero, una en febrero, dos en marzo, tres en abril, dos en mayo y una en junio, hasta la toma de posesión del nuevo Gobierno municipal, el 13 de junio, sin que aprobara el precio de las entradas ni la contratación del concierto.

Aunque ya había nuevo Ejecutivo, el Consejo Rector del IMCE no había sido constituido todavía el día del concierto, ya que la organización municipal no recibió el visto bueno del pleno hasta el 23 de julio, después del intento frustrado de la sesión del 12 de julio. El Ayuntamiento asumió el pago de 159.000 euros por el concierto de Sting.