Doce años de cárcel. Esa es la condena a la que se enfrenta un hombre de Guinea Conakry por cometer delitos de coacciones, hurto, allanamiento de morada e intento de homicidio. El procesado, que será juzgado la próxima semana en la Audiencia Provincial, entabló amistad con una de las colaboradoras de una asociación dedicada a prestar ayuda a inmigrantes. La mujer, "por motivos de amistad y solidaridad" lo acogió en su casa, situada en Lousame, partido judicial de Noia, a principios de 2013. Entre junio y julio de ese año abandonó la vivienda debido a que entre ellos se enfrió la relación. Desde entonces, comenzó a "hostigarla", según el fiscal, enviándole mensajes y llamándola de madrugada. En una ocasión entró en su casa y robó. La víctima denunció los hechos, por lo que a los cuatro días se le presentó en la vivienda e intentó matarla. La salvaron los vecinos.