El regreso al lugar en el que se cursaron los estudios es siempre emocionante para cualquiera, pero más para quien ocupa un cargo público, en especial cuando es el de alcalde. Por esa razón Xulio Ferreiro estaba ayer visiblemente afectado por su presencia en el instituto Puga Ramón para pronunciar la conferencia inaugural del curso escolar.

Y es que no que se trataba solo de volver al centro en cuyas aulas se había formado, sino que además un buen número de los actuales docentes habían sido profesores suyos cuando hace más de veinte años pasó por este instituto propiedad de la Diputación, por lo que algunos de ellos conversaron con él sobre aquellos tiempos. El centro incluso exhibió la ficha escolar de Ferreiro, en cuya foto el entonces joven alumno muestra una curiosa cara de sorpresa que no permitía vaticinar la responsabilidad que tendría en el futuro.

Tanto el regidor como la vicepresidenta del organismo provincial, Goretti Sanmartín, aprovecharon el acto para realizar una encendida defensa de la educación pública, ya que Ferreiro animó a los estudiantes a que se conciencien del papel de este tipo de centros para "crear una sociedad más justa, una sociedad más igual y donde la igualdad de oportunidades sea real". Sanmartín denunció por su parte los recortes realizados en materia educativa y expresó el compromiso del Gobierno provincial con la enseñanza pública, por lo que manifestó que la educación "no es un negocio, es un derecho".

La presencia del alcalde animó a muchos de los estudiantes a sacarse fotos con él y tras su conferencia fueron numerosos los que decidieron efectuarle preguntas, en especial sobre el tema lingüístico, a lo que Ferreiro respondió que llegó a ser el único joven que ligaba en gallego durante sus noches en el Playa Club y que pese a todo no le fue mal. Uno de los alumnos incluso se decantó por preguntarle acerca de la polémica vivida entre la Marea y el grupo socialista en el último pleno municipal.