La Xunta ha abierto la ría de O Burgo al marisqueo después de más de una semana cerrada por la aparición de toxina lipofílica -también conocida como diarreica-. A pesar de este cambio, los mariscadores no podrán faenar hasta el próximo sábado, ya que las mareas no son propicias para la extracción de bivalvos y es que no llegan a bajar lo suficiente como para que los trabajadores puedan acceder a las zonas productivas.

Los mariscadores perdieron durante estos días de veda una de las mejores campañas del año, ya que las mareas subían y bajaban mucho, una condición que favorece la extracción de bivalvos.

Para reivindicar el saneamiento de la ría de O Burgo salieron ayer a la calle centenares de personas. Mariscadores, vecinos, sindicatos y partidos políticos que exigen a las administraciones que se ponga en marcha la regeneración de la ría, que se conozcan los planes de trabajo y también las partidas económicas que se destinarán a este fin.

El portavoz de la Agrupación de Mariscadores a Pé da Ría do Burgo, Manuel Baldomir, aseguró ayer que, hasta que los trabajadores no vean las máquinas retirando los lodos del fondo del estuario, no se creerán las promesas de las administraciones de seguir adelante con el proyecto.

El último anuncio dice que será el 10 de noviembre cuando se conocerán los entresijos de las actuaciones, ya que se presentará el plan constructivo del dragado. A partir de entonces, aún quedan por completar trámites como los referentes al impacto ambiental, las alegaciones, su resolución, la licitación de las obras y su ejecución.

"En los años ochenta, esta ría daba de comer a 2.000 mariscadores, ahora no aspiramos a tanto, pero creemos que podríamos crear 400 empleos directos", explicaba ayer, en la salida de la manifestación, en la Casa das Palmeiras, de Cambre.

El presidente de la plataforma, Ramón Sixto, comentó ayer que esta concentración se convocaba, "un año más" para solicitar la "limpieza integral de la ría" y para que "las palabras se conviertan en hechos" y para que todos los anuncios que las administraciones hacen sobre los avances del dragado "sean publicados en los boletines oficiales".

Sixto reivindica la ría de O Burgo como "un motor económico para la comarca". Y es que, además de para el marisqueo, el estuario podría utilizarse para actividades de ocio y hasta para deportes acuáticos.

La manifestación lució pancartas, pegatinas y banderas de la plataforma, de la asociación de vecinos de O Temple, de Podemos A Coruña, de Esquerda Unida, del BNG y de la CIG, aunque algunos de los vecinos acudían sin más significación que la lucha por la limpieza del estuario. "Esta ría siempre dio de comer a mucha gente y tiene que seguir haciéndolo", explicaba ayer Carmen Varela, residente en la zona. El alcalde de Culleredo, Julio Sacristán, cargó ayer contra la Xunta por acusar a los concellos de no haber eliminado todavía los vertidos. "Es una contradicción", denunció Sacristán.