La circulación en el Ensanche se ve favorecida desde ayer por la mañana tras la apertura del tramo de la calle Federico Tapia que discurre entre Menéndez Pelayo y Fontán, que une las plazas de Vigo y Galicia, en el que se desarrolló la segunda fase de las obras de reurbanización de esta vía. Ese sector llevaba cerrado al tráfico desde el 30 de junio y estaba previsto que se abriese el 11 de noviembre, por lo que la programación de la obra se adelantó casi una semana. La realización de estos trabajos obligaba a efectuar desvíos de tráfico por las calles Menéndez Pelayo, Emilia Pardo Bazán y Notariado.
Las obras consistieron en la instalación de unas nuevas redes de aguas pluviales y fecales, así como en la renovación de canalizaciones, la mejora de la iluminación y el pavimento. Otras actuaciones desarrolladas en este proyecto fueron la colocación de nuevos semáforos, las señales de tráfico y bancos, además de iniciar la plantación de árboles en este tramo, en el que se prevé contar con una treintena de ejemplares en los próximos días.
La realización de los trabajos fue aprovechada también para reubicar en la calzada algunos elementos como los contenedores de la basura.
