El director de la refinería, Luis Felipe Llamas, ha asegurado esta mañana, que el incremento de las tasas que el Concello prevé cobrar en 2016 a las empresas que operan en el puerto, "reducirá la competitividad" de la empresa. Llamas ha defendido que Repsol cumple con la legalidad y que hace frente a sus tributos, tanto con el Puerto como con el Concello y que lo seguirá haciendo, a pesar del incremento. Fuera de esta subida, según consta en las ordenanzas fiscales, se quedan las empresas que se dedican a la pesca, que recibirán una bonificación del 50%.

En 2015, en total, la refinería pagó unos diez millones de euros en impuestos, de los que, aproximadamente, tres millones fueron para el Concello de A Coruña. Prevé que se duplicará la tasa que le paga al Puerto, con el incremento de impuestos recogido en las ordenanzas fiscales, aprobadas por el pleno el pasado lunes, por lo que destinará a esta partida en 2016, unos 150.000 euros.