La Audiencia Provincial confirmó la condena a un subinspector jefe de la comisaría de la Policía Nacional de Méndez Núñez en 2010. El procesado, que fue sentenciado a pagar una multa de 450 euros por cometer un delito de denuncia falsa, mintió al denunciar a un oficial de la Policía Nacional con el que había discutido. Así, aseguró haberlo visto golpear a un detenido durante la madrugada del 19 de febrero de 2010. El condenado, según consta en la sentencia, mantuvo su "temerario proceder" cuando declaró en sede judicial. El magistrado del Juzgado de lo Penal número 2 de A Coruña, además del abono de la multa, le impuso el pago de una indemnización de 2.000 euros a la víctima, que estuvo asistida por el letrado Pablo Freire.

El alto órgano jurisdiccional provincial desestimó los recursos presentados por la defensa y la acusación particular. El condenado solicitó su libre absolución. Así, en sus alegaciones indicó que el fallo de primera instancia vulneraba su derecho a la tutela judicial efectiva por inadmisión de prueba. El tribunal de la sección primera de la Audiencia Provincial, sin embargo, arguye que no cabe la declaración de nulidad del juicio ni la práctica ante él de las pruebas denegadas. El condenado también apeló a la vulneración del derecho a la presunción de inocencia, ante lo que los magistrados respondieron que en el juicio se practicó la prueba, que fue valorada "desde el privilegio de la inmediación, de manera lógica y racional". Además, destacan que el juzgado no expresa "en absoluto la más mínima duda sobre la culpabilidad del imputado".

En cuanto a la falta de motivación de la sentencia respecto a la responsabilidad civil, el tribunal subraya que unos hechos como los condenados conllevan "necesariamente un daño moral", al tiempo que advierte al acusado de que "no puede quejarse" porque la cantidad es "simbólica", ya que la acusación particular demandaba que abonase 9.000 euros.