Jugadores del Club Deportivo Eirís se concentraron ayer en su campo con sus familiares antes de iniciar el entrenamiento para expresar su protesta por la falta de solución a la carencia de iluminación, ya que los focos del terreno de juego no funcionan desde hace cuatro meses por el robo del cableado. El club reclama desde entonces al Concello la reparación, sin que haya visto atendida su solicitud.