La falta de sintonía entre el Gobierno local y los grupos del PSOE y el PP al negociar la elaboración del presupuesto de este año contrasta con el entendimiento en varios aspectos en las reuniones con el BNG, del que el Ejecutivo de Xulio Ferreiro está dispuesto a incluir "la mayor parte de sus propuestas" en las cuentas de 2016.

La edil de Facenda, Eugenia Vieito, resaltó ayer que el encuentro mantenido con la portavoz nacionalista, Avia Veira, fue "muy productivo", ya que el BNG aportó medidas concretas y cuantificadas. "Creemos que hay posibilidades de llegar a un acuerdo y esperamos una respuesta del BNG en los próximos días", comentó Vieito. El grupo nacionalista tomará una decisión sobre su voto al proyecto de presupuesto municipal cuando tenga acceso al expediente final.

El Bloque también destacó las sensaciones positivas de las conversaciones por haber asumido el Gobierno local "muchas" de sus propuestas, aunque precisó que no decidirá si apoya el presupuesto "hasta tener acceso al expediente definitivo". El BNG explica en una nota que el Ejecutivo aceptó aumentar partidas para reformas en mercados, apoyar la Feria del Libro, fomentar la compra de libros, reformar centros de Primaria y hacer actuaciones en los barrios. Por el contrario, añade el BNG, el Gobierno local rechazó iniciativas como la de municipalizar servicios o aumentar la inversión para la Renta Social Municipal.

El edil de Facenda volvió a tender la mano al grupo socialista para debatir de nuevo sobre el presupuesto por las "coincidencias" que advierte en sus propuestas, pero le demanda que presente iniciativas concretas para alcanzar un acuerdo.

El PSOE reiteró ayer su negativa a negociar las cuentas si no recibe "garantías" de que las aportaciones que efectúe sean recogidas en el presupuesto, para lo que recordó la "retahíla de incumplimientos sobre compromisos que están firmados", según explicó José Manuel García. Para este edil, su grupo decidió paralizar la negociación "ante la falta de seguridad en el cumplimiento de la palabra dada", aunque aclaró que el PSOE aún no ha decidido qué votará si el presupuesto se lleva a pleno en marzo. García negó que su grupo reclamara un detalle exhaustivo de cada partida y aseguró que solo lo exigió de las de "seis cifras".

El PP acusó al Gobierno local de romper la negociación de modo "unilateral" y justificó que no presentase propuestas concretas por la falta de la documentación que exigió sobre previsión de ingresos y ejecución del gasto, así como de las partidas de cada área municipal. El concejal Roberto Coira criticó el aumento del 63% en la externalización de contratos y del 50% en publicidad y la reducción en un 55% de la inversión en vías públicas. Pese a las diferencias ideológicas entre PP y Marea, Coira se declaró convencido de que ambos partidos podrían estar de acuerdo en "muchas necesidades" de la ciudad.