Una mujer de 34 años se sentará a finales de marzo en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número 4 de A Coruña como sospechosa de un delito de homicidio por imprudencia grave. La imputada, que cuando sucedieron los hechos tenía 31 años, mató a su novio de 25 años tras atropellarlo durante una discusión, según consta en el informe elaborado por la Fiscalía. El 16 de junio de 2012 de madrugada, ambos mantuvieron una "agria y prolongada disputa" por diferentes calles de la localidad de Carballo. Durante la pelea verbal, la acusada se dirigió a su coche, mientras que su compañero sentimental optó por continuar la marcha caminando.

El representante del Ministerio público relata que "algún tiempo después", sobre las seis de la mañana, la imputada observó a su novio cuando transitaba por la avenida Ponte da Pedra, en el lado contrario al que ella circulaba. Entonces, decidió acercarse a él, para lo que atravesó el carril contrario a su marcha y detuvo el automóvil en la zona de estacionamiento situada al lado de la acera por la que caminaba su pareja. La procesada bajó su ventanilla y ambos reanudaron la discusión.

En un momento dado, la mujer reanudó la marcha del turismo a pesar de que su compañero sentimental estaba pegado a la parte delantera o lateral izquierda del automóvil. "Efectuó un brusco giro a la derecha con el fin de incorporarse a la calzada, con lo que alcanzó de llenó a su pareja", describe el fiscal en su escrito de calificación, en el que subraya que no existe "la debida constancia" de que el propósito de la sospechosa fuese atropellar a su novio.

Como consecuencia del impacto, la víctima salió despedida hacia la acera y se golpeó la cabeza contra el asfalto, lo que le causó la muerte minutos después del impacto. La Fiscalía calificó los hechos como constitutivos de un delito de homicidio por imprudencia grave, por lo que reclama que la imputada sea condenada a dos años de cárcel y a la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante tres años, lo que conllevaría la pérdida de vigencia del carné. Además, el representante del Ministerio público demanda al magistrado del Juzgado de lo Penal número 4 de A Coruña que le imponga a la procesada, que carece de antecedentes penales, el pago de una indemnización de 44.000 euros a cada uno de los padres del joven fallecido.