La carrera política de Carlos Negreira había comenzado ya muchos años atrás en la administración autonómica y la estatal, pero el 7 de abril de 2006 inició una nueva etapa con su designación como candidato a la Alcaldía por el Partido Popular. La decisión fue tomada por el comité ejecutivo provincial del PP y supuso una convulsión en la formación conservadora, ya que en aquel momento el portavoz municipal era Fernando Rodríguez Corcoba, que un año antes había dimitido como presidente local del partido por no haber sido incluido en la candidatura de las elecciones autonómicas.

Desde entonces Corcoba se había distanciado de forma progresiva de la dirección gallega del PP, en la que por el contrario Negreira tenía buenos contactos, en especial con Alberto Núñez Feijóo, quien sería el sucesor de Manuel Fraga. El PP coruñés optó por disolver la junta local coruñesa para evitar nombrar una gestora, ya que eso le habría obligado a organizar un congreso en el que podrían haber surgido voces contrarias a Negreira entre los partidarios de Corcoba. La fórmula elegida para salvar este escollo fue la de encomendar al ya aspirante a la Alcaldía la coordinación de los comités de barrio del partido, del que al día siguiente ya se desmarcó Corcoba al anunciar que concurriría a las elecciones al frente de una candidatura independiente. Dos meses después, abandonó el PP, pero no el Ayuntamiento, en el que permaneció como concejal no adscrito durante un año con otros dos miembros del grupo popular.

Negreira salió finalmente elegido edil en 2007 y cuatro años más tarde obtuvo un resonante éxito al conseguir la Alcaldía. Pero su mandato no pudo tener continuidad ante la irrupción de Marea Atlántica, que logró más respaldo del pleno en la investidura del alcalde.