La estación de tren de San Cristóbal carece de las medidas de seguridad requeridas para el nivel 4 de alerta por amenaza terrorista decretado por el Ministerio del Interior. Así lo aseguran los sindicatos, quienes sostienen que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) incrementó los controles tras la información publicada la semana pasada en este diario en la que advertían de la falta de seguridad. El aumento de vigilancia provocó largas colas y retrasos en la mayoría de los trenes. En el trayecto de A Coruña a Santiago, de media hora, se registraron retrasos de 15 minutos.

Las protestas de los viajeros llevaron a Adif a ser más permisiva en los controles, pues ayer por la tarde el examen de las maletas ya no era tan minucioso. "Hay un conflicto entre el departamento de seguridad y el comercial", apuntan fuentes sindicales, quienes advierten de que el aumento de seguridad de la semana pasada también era insuficiente para el nivel de alerta existente. Consultado ayer por este diario, Adif no se pronunció.

Si bien los vigilantes del control de seguridad a través del escáner pasaron de uno a tres, lo único que se examinaba eran los equipajes. Tanto UGT como el Sindicato Unificado de Policía (SUP) demandan que se instale un arco de seguridad para impedir que los viajeros puedan acceder a los trenes sin control. "Con el nivel de alerta que hay y lo que ha pasado en Múnich hoy [por ayer] no es para tomárselo a la ligera. No hay arcos detectores de metales, por lo que la seguridad es insuficiente", explica la portavoz del SUP, Sandra Castro, quien subraya que la seguridad está "coja".

La Policía Nacional reforzó la brigada móvil en la estación de tren, que cuenta con 25 efectivos. Las medidas de seguridad que debe tomar Adif, a través de agencias privadas, son las que los representantes sindicales consideran "insuficientes". El sindicato UGT, al igual que el SUP, también denuncia que en hay estaciones que no tienen ningún tipo de control. "Por mucho que se vigile en A Coruña luego puede subir durante los trayectos viajeros a los que no se les examina ni las maletas", señalan.

En San Cristóbal no hay controles para acceder a la zona de espera, incluso sin poseer billete se puede estar en los asientos metálicos de la estación. En esta zona, es la Policía Nacional la que cuenta con las funciones de seguridad y vigilancia pero, pasados los tornos, los responsables son los vigilantes privados, quienes, según UGT, tienen dudas sobre cómo desempeñar su labor. Así, el sindicato sostiene que no han recibido instrucciones claras sobre qué prendas de abrigo es obligatorio pasar por el escáner o dónde se revisa una maleta en caso de tener que hacerlo manualmente.