El presupuesto participativo empieza a gatear con la invitación del Gobierno de Marea a los ciudadanos a que propongan inversiones en la ciudad y su voz tenga eco y reflejo en las cuentas del próximo año. El debate, la información, la presentación de iniciativas y el análisis de los proyectos determinarán en los próximos meses, hasta septiembre, la elección de inversiones por un valor de un millón de euros surgidas directamente de los vecinos para que se incluyan en el documento presupuestario de 2017.
El punto de partida de esta implicación ciudadana en la elaboración del presupuesto municipal tuvo lugar ayer en el Palacio de María Pita. De momento, con presencia vecinal escasa, unas 25 personas que pasaron calor en el Salón Real, que de voz del alcalde, Xulio Ferreiro, y de la concejal de Participación, Claudia Delso, escucharon en qué consistirá el protagonismo de la ciudadanía en una inversión participativa.
Por inversión debe entenderse, explicó Delso, todo aquel proyecto de competencia municipal que sea "legal" y "viable". Se admiten por tanto construcciones o reformas de infraestructuras, reposiciones y adquisición de elementos de transporte o informáticos, pero no se aceptan gastos corrientes o de personal, conservación o mantenimiento de edificios ni iniciativas que no dependan del Concello.
Las fases del proceso son cuatro. En la primera -el acto de ayer en el concello sirve de ejemplo- se expondrán las características de este plan participativo a entidades y colectivos en distintos barrios y zonas de la ciudad para que los asistentes debatan sobre las ventajas que obtienen los ciudadanos con su implicación en el presupuesto que deba manejar el Gobierno local.
En la segunda, ya la próxima semana, cada entidad o persona -las propuestas se pueden hacer a título individual y los encuentros los puede organizar asociaciones- formulará sus ideas y proyectos en los canales de participación A Porta Aberta en las bibliotecas municipales y el Centro de Información Xuvenil del Fórum.
La tercera fase traslada las propuestas a los servicios municipales para que las analicen y seleccionen las más interesantes desde el punto de vista económico y según su viabilidad. El último paso, el cuarto, es el de la votación final: las que susciten los informes más favorables serán las que aparezcan incluidas en el presupuesto municipal de 2017.
Barrios y futuros distritos
Dos vecinos plantearon sendas consultas. Se les explicó qué tipo de propuestas pueden exponer y cuáles no y se les contó que las iniciativas están abiertas a todas las zonas de la ciudad, es decir, que no va a haber distinciones entre barrios a la hora de escoger proyectos. La edil de Participación matizó sin embargo que cuando el Gobierno local confeccione la delimitación de la ciudad según distritos a cada uno le corresponderá una asignación económica.
La jornada informativa de ayer animó a los vecinos que asistieron a formar grupos e interactuar para comenzar a debatir sobre la relevancia de esta iniciativa participativa propuesta por el Gobierno de Marea. Con el planteamiento de tres preguntas sobre el significado de poder tener presencia en los presupuestos, las propuestas que les gustaría compartir y los aspectos que echan en falta en el proceso los ciudadanos dieron los primeros pasos de un plan que, como apuntó el alcalde, abre la puerta de forma directa a la participación en la vida municipal.
