"El examen de Lengua fue muy largo y no dio tiempo a acabar. Fue mucho más fácil de lo que pensábamos, en comparación con los de clase fue más fácil. Ahora en el descanso ya no repasamos porque da igual, no vamos a aprender nada más de lo que sabemos. Por la noche dormimos bien, es más importante descansar que estudiar. Al principio estábamos nerviosos, pero al sentarnos a hacer el examen ya nos pasaron los nervios".