La noche de San Juan reunió a 150.000 personas en los arenales coruñeses, según la estimación del Ayuntamiento, que informó de que 130 tuvieron que ser atendidas por quemaduras, intoxicaciones etílicas y heridas leves. El año pasado demandaron atención sanitaria 237 personas y, en 2014, 119. Los equipos sanitarios trasladaron a centros hospitalarios a 30 heridos, frente a los 24 de 2015. De las 130 personas que requirieron asistencia en los hospitales de campaña habilitados en el paseo marítimo, en la zona de la Coraza, 32 presentaban quemaduras; 32, heridas de carácter leve; 27, intoxicaciones etílicas; y 8 necesitaron limpiezas oculares por problemas con la arena. Las quemaduras que fueron atendidas en 2015 cuadruplicaron a las de este año.

En el hospital Universitario ingresaron dos hombres, un vecino de Carballo y otro de Cee, con quemaduras graves sufridas durante la celebración de San Juan. Ambos permanecían ingresados ayer por la tarde. Fuentes del complejo indicaron que en Urgencias detectaron un incremento de pacientes atendidos por quemaduras con respecto a otros años.

La cifra de asistentes a la celebración de San Juan facilitada por el Concello es la misma que el año pasado: 150.000 personas. El dispositivo de seguridad establecido durante la madrugada del 23 al 24 de junio en las playas contó con más de 500 personas, de las que casi 400 fueron personal de emergencias. La Policía Local comunicó que fue el San Juan "con menos incidencias de los últimos años" y señaló que los agentes no tuvieron que intervenir en peleas. La concejal de Medio Ambiente, María García, destacó que no hubo "que lamentar ningún incidente de consecuencias graves", al tiempo que resaltó que la noche fue "bastante tranquila" en el ámbito de la seguridad. La edil, además, aseguró que los arenales de Oza, San Amaro, Matadero y Riazor, registraron "una sostenibilidad muy positiva". Así, indicó que el "comportamiento" de los asistentes a la celebración fue "bastante bueno" y subrayó que el Concello tiene que seguir "trabajando en esa línea". García recordó que el Gobierno local apuesta "por seguir avanzando para mejorar la sostenibilidad durante esta fiesta y el resto".

El Ayuntamiento informó de que en las playas se recogieron 190 toneladas de basura, lo que supone un descenso, respecto al año pasado, cuando se depositaron 211 toneladas de desperdicios. Las tareas de limpieza comenzaron de madrugada, a las 06.30 horas, cuando todavía había gente en los arenales, y se prolongaron hasta última hora de la tarde. Los camiones recogieron 87.440 kilos de material inorgánico y 3.020 kilos de vidrio de los contenedores especiales dispuestos en el paseo marítimo, frente a los 8.000 de 2015. La Concejalía de Medio Ambiente habilitó este año contenedores específicos de papel y cartón en la zona de playas, de donde se recuperaron 80 kilos.