Menos de 12 horas han bastado para que los ánimos entre los hosteleros de la calle Troncoso y el Concello se calmasen después de un "erróneo" anuncio de la Policía Local el jueves por la noche, en el que indicaban a los empresarios de la zona que tendrían que retirar sus terrazas cuando se celebrasen conciertos en María Pita durante las fiestas de agosto.

Los hosteleros se reunieron a primera hora de la mañana con el director de Seguridad Ciudadana, Carlos García Touriñán, y el concejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz, quienes les comunicaron que simplemente deberían mantener un pasillo de 2,70 metros de ancho entre los dos extremos de la terrazas para permitir el paso de ambulancias o vehículos de bomberos en caso de emergencia. "La nuestra es una calle muy ancha. Estas condiciones ya las estamos cumpliendo actualmente y somos una de las pocas calles que lo hace", señaló el cocinero Pablo Gallego.

Estas condiciones distan de las trasladadas el jueves a la tarde por una patrulla de la Policía Local que, según señalaron los propietarios de los locales, les notificó verbalmente que no podrían colocar mesas, sillas, maceteros, mamparas y toldos a lo largo de la calle durante esas jornadas al tratarse de una vía de evacuación en caso de que se produzca alguna incidencia. La noticia sentó especialmente por comunicarse con tan poca antelación, ya que el lunes se celebra el pregón y las fiestas se abren en María Pita con el concierto del cantante brasileño Carlinhos Brown. El Concello tachó el malentendido de un "error de comunicación".

El Gobierno local defendió que su planteamiento de seguridad para las fiestas "no dista de años anteriores" y que todos los locales de la ciudad que cuentan con terraza podrán mantenerla, teniendo que dejar ese espacio intermedio para la circulación, cuyo ancho variará en función de las calles.

Según trasladó a los hosteleros, el Concello permitirá que se instalen barras y tiradores de cerveza tanto en Troncoso como en María Pita, siempre que se respeten estas distancias y no se bloquee el paso en zonas esquineras. Gran parte del dispositivo de seguridad se centrará en la plaza principal de la ciudad, que vivirá sus momentos álgidos el lunes, el 11 de agosto, con el concierto de Loquillo; o el 13 de agosto, con la actuación del venezolano Carlos Baute.

Al igual que en anteriores ediciones, los conocidos como arcos de evacuación del entorno de María Pita hacia la Ciudad Vieja quedarán libres para garantizar la correcta salida de vehículos de emergencia y otros dispositivos de seguridad. Estos tres arcos se corresponden con las dos escaleras que conectan el vial de Troncoso con la Ciudad Vieja, así como la plazuela de los Ángeles, en Puerta Real.