Ni el Ayuntamiento ni la Inspección de Trabajo han encontrado irregularidades o situaciones de riesgo en la entrada de la planta de Nostián. Hasta allí fueron tras la denuncia de la plantilla de la recogida de basura, que pidió la paralización del servicio debido a los problemas que podrían tener los camiones al llegar a las instalaciones municipales para el tratamiento de residuos por el mal estado y la acumulación de basura y lodos. Los trabajadores han vuelto a pedir inspecciones a ambas administraciones porque, aseguran, la concesionaria solo adecentó el lugar para las visitas pero todo ha vuelto a la situación inicial.

"No se detectó ninguna irregularidad grave", señaló la concejala de Medio Ambiente, María García, tras el análisis de los técnicos municipales. Eso no quiere decir, añadió, "que no haya que seguir atentos". Las conclusiones de Inspección de Trabajo, que también acudió al complejo de Nostián, fueron en la misma línea que las del Concello.

El Comité de Empresa de Cespa -concesionaria de la recogida- había denunciado formalmente el riesgo que suponía para los operarios realizar las descargas en la planta de reciclaje de titularidad municipal gestionada por Albada. Describían el "deplorable" estado de las instalaciones, con un peligro "grave e inminente" para los operarios que descargan en la zona. Apuntaban a la presencia de residuos en el exterior, algo que la empresa negó.

Los trabajadores advertían de que el suelo enlodado causaba derrapajes y problemas de adherencia de los camiones, impidiendo distinguir las irregularidades del suelo por el que circulan. Los problemas, añadían, se multiplicaban los fines de semana debido a la ausencia de personal.

La revisión municipal se realizó, tal y como había explicado la edil responsable, a lo largo de cinco días para tratar de determinar si se estaba produciendo alguna anomalía y había que tomar medidas urgentes. Los técnicos recabaron datos y se hablaron con los distintos actores de esta situación.

Pasado un mes desde las inspecciones, los representantes de la recogida de basura indican que todo vuelve a estar igual. "Mientras el Concello y Trabajo estuvieron vigilando, se puso bien; en cuanto se marcharon dejaron de baldear y volvió a estar igual", manifiesta el presidente del Comité de Empresa de Cespa, Luis Martínez. El Comité ha remitido tanto a la Concejalía de Medio Ambiente como de nuevo a la Inspección de Trabajo documentos gráficos para reactivar la denuncia la denuncia que realizaron el pasado mes de noviembre.

La empresa concesionaria de la planta, Albada, responde que no van a entrar a valorar "acusaciones falsas" como "ha quedado claro que son por parte de Inspección de Trabajo y del propio Comité de Inspección y Seguridad de la Planta", formado por trabajadores. Fuentes de la empresa advierten de que "cada uno es dueño de sus actos". La firma indica que, sobre todo cuando hay lluvia como ayer, se puede formar barro en la zona de descarga como se formaría en cualquier zona de descarga de una empresa pero que en ningún caso, insisten, tiene que ver con restos de basura.