La empresa Eulen seguirá con la gestión de las bibliotecas municipales hasta que el Concello recupere el servicio. Fuentes del Gobierno local indican que el proceso sigue adelante y que, si bien el contrato con la concesionaria expiró el 15 de noviembre, llegó a un acuerdo con la empresa para que siguiese prestando el servicio, en principio durante cuatro meses, un plazo que se acabaría mañana, pero que se extenderá hasta que se complete la municipalización de las bibliotecas municipales.

Durante el proceso de municipalización, que cumple nueve meses, los trabajadores de las bibliotecas -que se posicionaron a favor de la transición- demandaron al Gobierno local más información sobre cómo se aplicará el proceso- demandaron al Gobierno local más información. Los trabajadores indican ahora que siguen "a la espera de ser emplazados a participar" en la comisión política como "representantes legítimos de la plantilla de la empresa para hacer las aprotaciones precisas y para que proceso discurra bien para las partes".

El Concello anunció el 9 de junio del año pasado que se haría cargo del servicio en cuanto acabase la concesión con Eulen, el 15 de noviembre. Con esta medida anunció que se ahorraría más de medio millón de euros cada año (532.090 euros). El 20 de octubre, el concejal de Culturas, José Manuel Sande, mantuvo una reunión con la plantilla de las bibliotecas en la que le indicó que los trabajadores se incorporarían al proceso una vez que la comisión técnica realizase un borrador de la situación. Los representantes de los empleados tienen voz pero no voto en los acuerdos.

Ya en el mes de enero, la Comisión de Estudio de la municipalización de la gestión de las bibliotecas, integrada por todas las fuerzas políticas con representación en María Pita, se reunió para avanzar en el proceso, para entonces, faltaban todavía los informes del secretario y del interventor y también que los trabajadores se integrasen en las conversaciones sobre el cambio de modelo en la gestión.

La municipalización tendrá que ser sometida a la opinión del pleno, de modo que el PP, en esa reunión, solicitó los informes y la portavoz del BNG, Avia Veira, solicitó que los trabajadores formasen parte del proceso de rescate de la gestión de las bibliotecas, no solo los representantes de la plantilla contratada por Eulen sino también la Junta de Personal del Concello. Para entonces, el Gobierno local aseguró que convocaría a los trabajadores a la siguiente reunión, en cuanto tuviese los informes necesarios para avanzar en el proceso.

En el programa electoral de Marea Atlántica había dos puntos relativos a las bibliotecas municipales: el siete, que hacía referencia a la gestión municipal de este servicio así como a la auditoría y fiscalización de sus cuentas y también el 82. En este apartado, Marea Atlántica defendía la elaboración de un Plan Municipal de Bibliotecas y de un plan de lectura para fomentar el uso de este servicio.