Los usuarios de los autobuses urbanos realizaron el año pasado 21,5 millones de viajes, un 2,6% más que en 2015, cuando hicieron 20,9 millones. La línea más utilizada, con 2,5 millones de trayectos, lo que supone un 11,6% del total, fue la 14, que une Os Rosales con la plaza de Pablo Iglesias, en O Castrillón. Tras ella se sitúa la 6 -con su prolongación 6A-, que circula entre la avenida de Hércules y Meicende. En 2016 registró 2 millones de trayectos, un 3,59% más que el año anterior, cuando se amplió el itinerario con paradas en Meicende, en el Concello de Arteixo. El tercer puesto entre los buses más usados lo ocupa la línea especial de la Universidad, que contabilizó 1,88 millones de recorridos, el 8,75% de los usuarios.

En la cola, sin contar el búho y la línea que da servicio al personal de la Compañía de Tranvías, se sitúan la 23 y 23A, que dieron servicio a 292.414 coruñeses que viajaron entre el hospital Abente y Lago y Breogán. En porcentaje, las únicas que bajan con respecto a 2015 -un 1,51% menos- son la 4, que transportó a 1,8 millones en el recorrido que va desde la avenida de Hércules al Barrio de las Flores, y la de la Universidad, a la que se subieron 10.061 pasajeros menos. No obstante, ambas se sitúan en el tercer y cuarto puesto del ranking de las líneas más utilizadas. El que más incrementó el número de usuarios fue el servicio de transporte nocturno (búho), un 12%, seguida de la 1, que circula entre el Abente y Lago y O Castrillón. A ella se subieron 840.278 pasajeros, un 5,40% más que en 2015.

La línea de personal registró una subida de un 67,5%, pero es una ruta atípica que la empresa habilita para sus conductores y que solo se dirige a cocheras, si bien permite que los usuarios se suban si les va bien el recorrido. En 2016 contabilizó 19.350 viajeros.

La mayoría de los pasajeros, 15,7 millones, pagaron con tarjeta. El 73% de los trayectos se abonaron en 2016 de esta forma, mientras que los pagos en efectivo descendieron con respecto a 2015 un 1%, con 3,8 millones de viajes, lo que representa un 18,07% del total. La Compañía de Tranvías registró el año pasado 1,2 millones de transbordos entre líneas, el 5,86% de todos los viajes. Los cambios metropolitanos ascendieron a 566.000, lo que representa el 2,59% del total.

Los usuarios del bus urbano se incrementaron durante los últimos tres años. El mayor aumento, un 2,6%, se produjo en 2016, en el que hubo 544.453 viajeros más que en 2015. Estas cifras, sin embargo, aún no alcanzaron las de antes de la crisis. En 2008 los vehículos trasladaban a casi 22 millones de coruñeses. El año pasado viajaron en los buses 21,5 millones de personas, una media de 57.534 al día. El precio del billete, 1,30 euros, se congeló este año, al igual que los tres anteriores. Los usuarios del bonobús pagan 0,85 euros por viaje, mientras que escolares, desempleados, discapacitados y jubilados abonan 0,33 por billete. La tarifa universitaria cuesta 30 céntimos por trayecto. El último incremento de las tarifas se registró en 2014, cuando el bus dejó de costar 1,27 euros para subir al precio actual, 1,30 euros.

En las negociaciones de 2015 fueron los trabajadores de la compañía los que asumieron el impacto de los dos céntimos que le tocaba subir al billete entonces. La plantilla renunció al incremento salarial que le correspondía por convenio a cambio de que no subiese el precio de los viajes.