La única candidatura -previsiblemente será la única- que hasta ahora ha anunciado que quiere dirigir la Federación Unión de Comercios Coruñesa (FUCC) mantendrá los pilares que la que este mes finaliza su mandato, aunque su ausencia principal será la de su presidenta, Mariló Fernández, quien tras un año en el cargo reconoce no sentirse "capaz" de representar a algunos de los miembros. Adolfo López, del colectivo comercial de la Ciudad Vieja, ahora tesorero, es el aspirante a presidente. Le respaldarían Rafael Granados (As Conchiñas), María José de la Puente (Distrito Picasso), José Alejandro Salgado (Os Mallos) y Antonio Deus (A Falperra). Fernández asegura que prestará ayuda al nuevo equipo.

- Deja el cargo. ¿Por qué?

-No me voy por no tener ganas, sino porque no me veo capaz de representar a algún miembro de la asociación, dos o tres personas.

- ¿Qué ha pasado?

-Son personas que no tienen educación ni respeto. Me refiero a personas, no a las asociaciones que representan. Nunca esperaba que no tuvieran normas morales de conducta y que insultaran. Pero no me voy por estas personas, insisto, insisto, sino por no poder representarlas.

- Los que hasta ahora se postulan para relevarla en la FUCC han trabajado con usted. ¿Va a estar en la sombra?

-Me pidieron que fuera vocal, como hacen los presidentes salientes, pero no quise. Voy a estar para lo que me necesiten, trabajando con la federación. La candidatura es sólida y de consenso.

- ¿Está satisfecha de su trabajo este último año?

-Me voy con un muy buen sabor de boca, encantada y orgullosa de haber estado con los compañeros y de aprender, aunque aún me hace falta aprender más. Creo que en este tiempo he recibido el reconocimiento de casi todos. Me exigieron acciones y planificamos como pudimos, pero hemos recibido menos dinero y tuvimos problemas de comunicación con el Gobierno local. El comercio no el único que está parado, también infraestructuras y medio ambiente.

- ¿No mejora la situación del comercio coruñés?

-Seguimos en la misma mala situación de los últimos años. Abren locales, sí, pero son más los que cierran y el consumo sube muy poco.

- ¿Está unido el comercio local o cada uno hace su guerra?

-No hay ninguna desunión, todo lo contrario. Diría que ahora estamos mucho más unidos que antes.