La controversia entre Marea Atlántica y PSOE concluyó ayer con el acuerdo alcanzado para que 4,5 millones de los 9,6 que integran el superávit municipal de 2016 se destinen a reducir la deuda del Concello, como reclamaban los socialistas, mientras que el resto se dedicará a las obras con más impacto para la ciudadanía. La negativa de este grupo a aceptar una cantidad menor para esa finalidad motivó el rechazo a la propuesta de ampliación del presupuesto que el Gobierno local presentó en el pleno del pasado lunes, incluso después de que Marea plantease una enmienda a su propio proyecto para aumentar desde 537.000 euros hasta 2,5 millones la partida para amortizar la deuda.

"Hay ya un acuerdo con el PSOE y espero que se visibilice en la comisión de Facenda", declaró ayer el alcalde, Xulio Ferreiro, quien expresó su deseo de que de esa reunión, que se celebrará mañana, "salga una propuesta que cuente con el apoyo mayoritario del pleno". El regidor previó que la sesión se llevará a cabo el martes, ya que el Concello está obligado a que los proyectos de esta ampliación del presupuesto inicien el proceso de contratación antes de que termine el año.

"Nos alegramos de que todo se enmarque de una manera normal", manifestó ayer el portavoz socialista, José Manuel García, sobre el principio de acuerdo alcanzado, con el Gobierno local que espera que se concrete en la comisión de Facenda, ya que su grupo aún no dispone del documento definitivo. García apuntó que las inversiones que pretendía aprobar ya el Ejecutivo municipal se incluirán en el presupuesto del próximo año y, acerca de las diferencias surgidas en los últimos días con Marea Atlántica, advirtió: "Es muy difícil construir un entorno de trabajo y muy fácil cargárselo".

"Hicimos una selección de los proyectos que eran de ejecución más rápida y más segura", comentó Xulio Ferreiro sobre los proyectos que se financiarán con los cinco millones restantes con los que se ampliará el presupuesto de este año, en referencia al escaso tiempo del que dispone el Concello para poner en marcha su contratación, Las actuaciones en el espacio público, la renovación de pavimentos y el alumbrado en diferentes barrios, así como la mejora de la eficiencia energética tendrán prioridad frente a otros proyectos que figuraban en la propuesta inicial, según explicó el regidor.

Eso hace prever que se excluirán las obras proyectadas para la mejora del funcionamiento de la planta de tratamiento de residuos de Nostián, que suman 1,2 millones de euros y que el Gobierno local ya ofertó retirar en el pleno del jueves para intentar convencer al grupo socialista. El BNG había expresado su rechazo a la inclusión de estas partidas en la ampliación presupuestaria al considerar que deben ser costeadas por la concesionaria de la planta, opinión que también comparte el Partido Popular, que vertió duras críticas a esa iniciativa.

También es previsible que se supriman los 426.000 euros que pretendían dedicarse a la adquisición de licencias de programas informáticos, partida a la que el PSOE se mostró contrario por no considerarla prioritaria y que también el PP afeó al Gobierno local porque el programa electoral de Marea Atlántica defendía que el Concello apostase por la utilización del software libre en el Concello.

José Manuel García negó que las disensiones con Marea hayan afectado al presupuesto de 2018 al estimar que "el camino estaba ya despejado", por lo que confía en que habrá un pacto "salvo que incorporen cosas extraordinarias" su grupo desconozca. A pesar de que el PSOE ignora cuándo se presentará el proyecto, considera que aún "hay tiempo".