El Gobierno local negó ayer que los dos pisos adquiridos en concurso público a uno de los firmantes del manifiesto de Marea Atlántica incumplieran las bases de la convocatoria por tener una superficie útil inferior a la mínima exigida. La denuncia del supuesto incumplimiento la había lanzado previamente la portavoz municipal del Partido Popular, Rosa Gallego, quien, en rueda de prensa, había asegurado que también el segundo piso adquirido tenía, según la inscripción registral, menos de los 50 metros cuadrados útiles exigidos como mínimo en el concurso, en concreto 49,55.

En este segundo caso, la tasadora contratada para el concurso consideró "tras realizar las mediciones", según el Gobierno local, "que tiene 60 metros cuadrados útiles, más seis de trastero". En el primero, el Ejecutivo alegó que pese a que en el registro el piso figura con una superficie útil de 47,2 metros, ésta supera los 50 exigidos porque le es de aplicación la Lei de Vivenda, que incluye en la superficie útil la mitad de la terraza.

El jurado del concurso, compuesto por funcionarios de Urbanismo, Asesoría Jurídica e Intervención, acordó por unanimidad aplicar la superficie catastral "para todas las ofertas" porque ese dato solo figuraba en la inscripción registral en cuatro ofertas, según consta en su acta del 13 de noviembre. El tribunal optó por esta salida, recogida en las bases del concurso, "con la finalidad de emplear el mismo criterio objetivo para todas ellas".

Esta polémica se analizará el miércoles en dos comisiones, en la de Urbanismo, convocada por el Gobierno local tras reclamarlo el PSOE, y en la de Transparencia y Contratación, citada por el PP.