El veredicto del Banco de España confirmó ayer los peores augurios sobre el valor de Novacaixagalicia. El supervisor financiero, asesorado por tres bancos de inversión y tras auditar a la caja, cifró el precio de la entidad en 181 millones de euros, el 12% del valor patrimonial de Novacaixagalicia reflejado en los libros contables; lo que significa que aunque Novacaixagalicia aporte 1.714 millones de euros al patrimonio de NCG Banco, su peso accionarial en la entidad se calculará como si pusiese 181 millones de euros. Porque ese es el precio de Novacaixagalicia en el mercado, lo que los inversores pagarían por una entidad como ésta, aunque concentre el 46,7% del mercado financiero gallego.

El Banco de España aplicó un descuento del 88% sobre los activos de Novacaixagalicia, pero de ese patrimonio que pasó a formar parte del banco descontó las participaciones de los accionistas externos que existen en el Banco Gallego, porque no son activos pertenecientes a la caja. Por eso la valoración final fue de 181 millones de euros, equivalente en realidad al 10,5% del valor en libros de Novacaixagalicia y a la aplicación de un descuento del 89,5%.

Con ese descuento el peso que Novacaixagalicia en el accionariado del banco se reduce al 6,84% del capital, la mitad de lo que anunció el presidente de la Xunta. Alberto Núñez Feijóo aseguró que la caja tendría un 15% del capital de la entidad, y lo tendrá, aunque en una fecha por determinar antes del 15 de diciembre.

Fuentes próximas a la dirección de NCG Banco explicaron ayer que efectivamente la Xunta firmó un acuerdo con el presidente del banco, José María Castellano, con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y con el Banco de España que abre la puerta a que la caja alcance ese porcentaje en el capital. ¿Cómo? Para empezar, la caja tendrá que echar mano del fondo de 95 millones de euros que NCG Banco le legó para financiar la obra social cuando se produjo la constitución del banco. Ese fondo estaba pensado —y así se explicó al consejo de administración de Novacaixagalicia— para garantizar que la caja dispondría de un mínimo de 25 millones de euros cada año hasta 2015 para financiar la actividad de la obra social —mucho más reducida que la de 2011, con un presupuesto inicial de 87 millones, y muy lejos de las cifras destinadas a este fin en 2006 o 2007—. Para que obtenga la liquidez necesaria para completar la operación y financiar la obra social, NCG Banco se propone comprarle bienes a "precio de mercado", una operación que todavía tiene que concretarse pero que forma parte de ese acuerdo a cuatro bandas que publicitó Feijóo hace una semana y confirmó en días pasados durante un cara a cara en el Parlamento con el BNG.

La caja se garantiza así un 15% de capital en el banco, con lo que obtendrá ese mismo porcentaje de los dividendos que reparta la entidad, una cantidad que se espera modesta al menos hasta 2014.

Volver al 8% de capital principal

Algunas fuentes barajaron —y así lo explicaron los directivos de Novacaixagalicia en el consejo de administración celebrado ayer en Vigo— que la caja podría hacer uso del decreto de solvencia para que una vez alcanzado el 20% de inversores privados (lo que supondría una inyección de 550 millones) reclamase al Banco de España que reduzca sus necesidades de capital del 10% de capital principal que tiene actualmente NCG Banco al 8% que se exige a entidades como el Banco Pastor. Esta maniobra aumentaría el peso de la caja en el capital del banco automáticamente hasta un 9,4%. Esta vía "factible" según el entorno de Castellano está descartada, dado que tal y como está el panorama financiero internacional, la dirección prefiere un banco sólido, con un capital del 10,4%. Fuentes próximas a la dirección dudan además de que el Banco de España admita después de terminado el plazo fijado por el decreto de solvencia una modificación en los requerimientos de capital, sobre todo con lo exigente que se ha mostrado hasta ahora el supervisor en todo el proceso.

El FROB firmó ayer por la mañana dos opciones de compra a favor de Novacaixagalicia y de NCG Banco. La primera, para cerrar el incremento del peso accionarial de la caja, tiene de plazo hasta el 15 de diciembre; mientras que la segunda, de un año, se destina a los inversores, que sólo podrán comprarle al fondo de rescate bancario participaciones superiores a un 5%.

Para ello dispondrán de cuatro oportunidades; la primera quincena de diciembre próximo y las primeras quincenas de marzo, junio y septiembre de 2012. El fondo de rescate le aplicará a todos los compradores un interés del 12,5% anual, o de algo más de un 1% al mes, pero les cobrará el mismo precio por acción que ha pagado el fondo de rescate.

Fuentes próximas a NCG Banco aseguraron sin embargo que la dirección de la entidad tiene previsto cerrar la entrada de capital externo el 15 de diciembre. Al menos, el grueso. Castellano todavía mantiene la cifra de entre 500 y 700 millones de fondos institucionales estadounidenses y españoles y empresarios. Esta cifra podría aumentar porque Castellano todavía está pendiente de cerrar acuerdos con los industriales gallegos y no gallegos establecidos en México, a los que visitó la semana pasada y con los que todavía no hay nada cerrado. Además, hay una lista de 22 empresarios gallegos a los que podrían sumarse algunos más, según las mismas fuentes e incluso fortunas como Amancio Ortega, que de momento no está descartado.

El precio final dado ayer por el Banco de España no satisface a nadie. Ni a la caja ni a los políticos, empresarios, sindicatos y directivos del banco. Es bajísimo, aunque como reconocen fuentes próximas a la dirección de NCG Banco, se esperaba una valoración a la baja, como las que tuvieron Bankia y Bancaja en su salida a Bolsa. En este caso según el entorno de Castellano, ha pesado además que el banco no cotice. Y ni Castellano ni Novacaixagalicia participaron en una valoración que tal y como la caja anunció a mediados de mes, sería negociada a tres bandas por el Banco de España, los inversores y el propio Castellano.

Una caja de -287 millones

La valoración la realizaron tres bancos de inversión a partir de la auditoría que el Banco de España encargó a la consultora BDO. Como establecía el decreto de solvencia del Gobierno, esa due diligence fue sometida a la valoración de tres bancos de inversión. La norma establecía que si los valores que aportaban diferían en menos de un 10%, se hallaría una media aritmética de las tres. No fue así. Entre otras cosas, porque una de las valoraciones aseguraba que el valor de la caja estaba en -287 millones; es decir, que no sólo no tiene ningún valor sino que presenta un déficit de capital de ese montante. La media se estableció entre lo calculado por las otras dos entidades contratadas; una puso un precio a Novacaixagalicia de 174 millones y la otra, de 188.

¿ Y como llegaron a esa conclusión estas tres entidades? A partir de una evaluación que tiene en cuenta no sólo los activos de la caja segregados al banco sino el plan de negocio aprobado para NCG por el Banco de España y las proyecciones económicas para los próximos cinco años.

La junta de accionistas de NCG Banco aprobó ayer la ampliación de capital de la entidad para dar entrada al FROB que eleva el patrimonio neto de la entidad a 4.180 millones de euros y a 2.646 millones su valor de mercado. Su capital principal es sin embargo de 5.275 millones de euros, el 10,45%