Un año después de que el Gobierno decidiese subir una vez más el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) para incrementar los ingresos del Estado y cumplir así con el objetivo sagrado de reducir el déficit público, a la Agencia Tributaria no le salen las cuentas. Al menos, las que en su momento hizo el Gobierno para justificar la necesidad de un nuevo esfuerzo.

El Ministerio de Hacienda subió el tipo general del IVA del 18% al 21% y el reducido del 8 al 10% y algunos bienes que se gravaban con el tipo reducido pasaron a entrar en la tasa general, con lo que cines y espectáculos, floristerías, servicios funerarios y peluquerías, entre otros, sufrieron un alza extraordinaria de 13 puntos. El objetivo del departamento que dirige Cristóbal Montoro era incrementar los ingresos tributarios en 2.300 millones durante 2012, pero las estadísticas de la Agencia Tributaria evidencian que el Estado recaudó 1.162 millones, la mitad de lo previsto.

Las cuentas de 2013 no van por mejor camino. Si Hacienda esperaba lograr 10.134 millones más con el alza impositiva, hasta el mes de julio (el último del que la AEAT facilita datos) lleva recaudados 2.470 millones por este concepto. Si continúa el resto del ejercicio al mismo ritmo recaudatorio que hasta el séptimo mes del año, alcanzará en diciembre los 4.234 millones, un 42% de lo previsto hace un año, tal y como se recoge en el documento explicativo que el Ministerio de Economía publicó en una web para inversores extranjeros (www.thespanisheconomy.com) en julio del año pasado. A cierre de 2012, Montoro sacó pecho al asegurar que la recaudación por IVA se había incrementado un 2,3% respecto al año anterior, un avance que no se habría producido sin la subida, lo que garantizaba el cumplimiento del objetivo de déficit. Este año, el Estado alcanzó el déficit previsto para la Administración central este año (3,81%) en julio.

La recaudación fiscal ni siquiera parece ir camino de cumplir la previsión -mucho más pesimista- que lanzó la asociación de técnicos de Hacienda (Gestha) cuando el Ejecutivo aprobó la subida del IVA. Su presidente, José María Mollinedo, alertaba hace un año del impacto que la medida fiscal tendría sobre el consumo de los hogares. Auguró que la recaudación no superaría en 2013 los 7.500 millones.

¿Y qué pasa en Galicia? A falta de una previsión por comunidades, los ingresos derivados del IVA en Galicia acumulan una caída del 2% entre enero y julio de este año, lo que indica que el consumo de los hogares gallegos sigue bajo mínimos. El cierre de 2012 fue mejor para Hacienda en Galicia. Al sumar la recaudación del último trimestre del año pasado con la de los primeros siete meses de este año, los ingresos del Estado aumentaron en la comunidad un 7,8% respecto al mismo periodo de los ejercicios anteriores.

El comercio gallego se resiente

El comercio fue uno de los sectores que más criticó el alza fiscal de hace un año. El presidente de la Federación Galega de Comercio, José María Seijas, recuerda el tremendo impacto de la medida. "La subida del IVA y el momento en que se hizo fue totalmente desacertada. No cumplió las expectativas porque la caída del consumo impactó en la recaudación. La economía familiar se resiente por mucho que grandes cadenas hagan campañas de marketing y suban el IVA con retraso", explica. Seijas asegura que el comercio gallego lleva 36 meses "facturando a la baja" y que al IVA se sumó en diciembre la supresión de la paga extra a los funcionarios, tras lo que 2012 acabó con 2.500 comercios menos en Galicia. Aunque confía en que la incipiente mejora de la confianza del consumidor -ratificada por el CIS en agosto- se traduzca en un aumento del consumo, el máximo representante del comercio gallego advierte de que la comunidad perdió 18.279 tiendas entre 2008 y 2012, el 27% del total. En los últimos meses aprecia un estancamiento en la destrucción del sector: "Este año cerrarán un tercio de las tiendas que bajaron la persiana en los tres años anteriores. Las bajas se suman a las que ya había pero al menos parece que tocamos fondo".