Otra semana más, esta última ha dejado vía Boletín Oficial del Estado (BOE) la confirmación de que la reforma energética va camino de convertirse en una norma de récord en pleitos judiciales. Al margen de los contenciosos abiertos por grandes inversores internacionales en organismos europeos, el Tribunal Supremo acumula más de medio centenar y medio de recursos. Con dos por parte de la Asociación Eólica de Galicia (EGA), que planta cara tanto al real decreto que marcó el nuevo rumbo de la producción de renovables como la orden que fija las retribuciones. El BOE ya publicó la admisión a trámite de uno de los recursos de EGA.

El Supremo ya manifestó en otros pronunciamientos que un Gobierno no está obligado a seguir con una ley "por causas de interés general". "Si el Ministerio hubiera dictaminado directamente que no tenemos derecho a prima, poco se podría decir", explican desde EGA. Pero la clave de la retroactividad de la reforma energética no es esa. "Lo que dice el Gobierno es que el derecho a primas se acaba porque teóricamente se debe compensar primas futuras por las cobradas en el pasado. Ese fundamento no es legal", dicen los promotores, que buscan tumbar también la orden de retribuciones "porque está plagada de aspectos técnicos incorrectos".