Los trabajadores de Ferroatlántica en Cee y Dumbría -unos 400- temen por su futuro y denuncian que el plan industrial que presentó la compañía "era una gran mentira". El Comité de Empresa presentó alegaciones al recurso de alzada en el que la compañía rechaza la decisión de la Xunta de no autorizar la segregación de actividades de las plantas de ferroaleación y de generación hidroeléctrica -que frustró los planes empresariales de vender las segundas-. La plantilla pide al Gobierno gallego que se mantenga firme en su decisión para evitar la venta de hidroeléctricas que pretende el grupo de Villar Mir porque, permitir la desvinculación "sería condenar al cierre a las fábricas de A Costa da Morte, destruir cientos de trabajos y llevar a la ruina a toda la comarca", alerta.

El desencuentro entre Ferroglobe (multinacional en la que se integró Ferroatlántica) y la Xunta llevó a que la empresa trasladase a Puertollano la fábrica de silicio solar proyectada para el polígono de Sabón. Una decisión que el alcalde de Arteixo achacó a una "venganza" de a compañía hacia la Xunta.

Los empleados consideran que la venta de las centrales pretendida por Ferroatlántica forma parte de "una operación puramente especulativa". Argumentan que no es cierto que la empresa precisase liquidez para seguir adelante con su plan industrial, ya que el proyecto iniciado en Puertollano será más caro que el previsto para Galicia.

Los empleados temen por la continuidad de sus puestos de trabajo y se quejan de la "farsa" del plan industrial de la compañía para el territorio gallego, que ha quedado "sin efecto", denuncian. Acusan al Grupo Villar Mir de llevar a cabo una "cruzada contra el empleo y la viabilidad de las fábricas de A Costa da Morte".

Amenaza por nuevas fábricas

El conflicto sobre las centrales hidráulicas de los ríos Xallas y Grande no es la única preocupación de los empleados de A Costa da Morte ante los movimientos recientes de la empresa. También están molestos por la compra que acaba de hacer la multinacional: dos plantas de aleaciones de manganeso que Glencore tenía en Francia y Noruega. Entienden que estas factorías "se convertirán en competidoras directas de la producción que realiza en la planta de Brens en Cee" dentro del propio grupo empresarial, por lo que esta expansión supone "una nueva amenaza para la viabilidad y el futuro de Cee y Dumbría". En este sentido, lamentan que Ferroatlántica lleve 23 años sin hacer inversiones para modernizar el complejo industrial de A Costa da Morte, lastrando así su competitividad frente a plantas industriales más modernas y con un coste energético menor.