Más de cien personas fallecieron en Galicia entre el invierno pasado y la primavera de este año por complicaciones derivadas de la gripe, y seis de cada diez no se habían vacunado. Los mayores gallegos siguen siendo reacios a ponerse la vacuna, bien por pereza o por dejadez. La prueba está en que Galicia es la cuarta comunidad con la tasa de vacunación más baja de España. En 2015 solo se vacunó el 54,1%, cuando lo recomendable es llegar al menos al 65% de la población de más de 65 años.

En plena campaña de vacunación, la Consellería de Sanidade está dispuesta a llamarlos uno por uno para que no se olviden de ponerse la inyección. Y es que no solo es una cuestión de salud pública, sino también de recursos. Las olas de gripe terminan colapsando las urgencias de los hospitales, como ocurrió el invierno pasado, y además la prevención ayudaría a ahorrar gastos de hospitalización. Más de 1.700 gallegos estuvieron ingresados el año pasado por la gripe y la mayoría de ellos no estaban vacunados.

La propia Consellería de Sanidade reconoce que la tasa de cobertura es todavía baja y no solo ha intensificado las campañas para difundir la necesidad de la vacunación sino que este año ha decidido llamar por teléfono a los mayores para que acudan a vacunarse. A partir de la cuarta semana desde enfermería se llamará a los gallegos de entre 65 y 74 años.

Más centros de vacunación

Además se han incrementado los centros de vacunación. De los 650 habituales se ha pasado a 900. A los centros del Servizo Galego de Saúde (Sergas) se suman, este año, centros médicos y consultas privadas, residencias, centros de empresas o servicios de prevención de riesgos laborales. El Sergas prevé este invierno que la gripe tenga una intensidad "media moderada".

En España la media de vacunación es del 56,1% de la población. Galicia está por debajo de este porcentaje, pero además solo la Comunidad Valenciana (con el 50,7% de la población protegida), Baleares (47,3%) y Murcia (37,5%) tienen peores registros. Por el contrario, otras autonomías como La Rioja, con el 65,5%, y Castilla y León (64,4%) sí alcanzan la ratio mínima recomendada.