Compañeros de Raquel Gago, la policía local de León acusada por el asesinato de la presidenta de la Diputación leonesa Isabel Carrasco, afirmaron ayer ante el tribunal que juzga el crimen que es una persona "muy introvertida" y que nunca tomaba la iniciativa en situaciones comprometidas.

Un policía que compartió servicio con Raquel Gago ha recordado ante el tribunal algunas situaciones de tensión en las que la agente no supo cómo reaccionar. Concretamente, se ha referido a un altercado que presenció y recordó que Raquel "se fue haciendo pequeñita, pequeñita", cuando un conductor que iba a ser multado reaccionó mal y empezó a gritarle. También recordó cuando un hombre de raza negra, alto y muy corpulento, huyó frente a ella, "no supo como reaccionar" y fue arrollada. Este agente también ha destacado que Raquel Gago es muy buena persona y que la ve "incapaz de meterse en un fregado así", en alusión al asesinato de Carrasco.

También el hermano de la acusada, Carlos Gago, declaró que ha visto "bloquearse" a la joven en alguna ocasión en situaciones de estrés. En su declaración, definió a su hermana como "muy buena persona, familiar y cariñosa" y subrayó que sería incapaz de participar en un asesinato.