El Director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, propuso el pase a la situación administrativa de suspenso en funciones y la revocación del destino que desempeñaba en el puesto de Ortigueira el guardia civil D.V.F, al ser el presunto autor de los delitos de amenazas graves, daños y conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, ocurridos en San Sadurniño el pasado domingo cuando efectuó varios disparos contra una vivienda de esa localidad, y de quien se decretó su libertad provisional con una orden de alejamiento de 400 metros de las víctimas y la prohibición de acceso a armas de fuego.

Desde que se detuvo al presunto autor de los disparos se decretó el cese cautelar de funciones del agente y se iniciaron los trámites para la apertura de un expediente disciplinario por una presunta falta grave, sin perjuicio de la colaboración con el juzgado para esclarecer los hechos.