Pereza continúa saboreando el éxito. Su nuevo disco Aviones está siendo un éxito de crítica y público y han compuesto y producido la música de dos canciones del nuevo disco de Joaquín Sabina. La vida les sonríe pero, como recuerda Rubén: "Sabemos que en cualquier momento podemos volver a tocar en un garito para 20 personas". Habituales visitantes de A Coruña, el dúo madrileño presentará su último álbum el próximo 7 de noviembre en el Coliseum. Prometen un concierto más acústico, "pero igual de cañero".

–Se nota que han escuchado los discos de Tom Petty y los Traveling Wilburys durante el proceso de creación de Aviones.

–La verdad es que Tom Petty nos encanta y nos hemos fijado mucho en su forma de utilizar la Rickenbacker de doce cuerdas y sus muros de acústicas. Los Traveling son cinco all stars y cualquiera que esté relacionado con la música debe tener sus discos grabados a fuego. Han estado muy presentes en el disco por su forma de tratar las acústicas.

–¿Cómo llevan dos rockeros tocar en un teatro con la gente sentada?

–Bien porque la verdad es que la gente dura poco tiempo sentada. Es muy agradecido el teatro para el sonido porque en los pabellones la música rebota mucho y a veces están más preparados para partidos de baloncesto y cosas de ese tipo. Mola que en el teatro hay intimidad y que hay momentos de silencio.

–¿Impone mucho trabajar mano a mano con Sabina?

–Tener una canción con tu ídolo es increíble. Le enviamos la música y él escribió las letras. Luego nos llamó para grabar y al escucharle meter la voz te quedas loco. Estamos encantados porque Sabina es el grande de la canción en castellano y el resto tratamos de acercarnos a la suela de sus zapatos.

–¿Seguirán los pasos de su amigo Quique González y grabarán algún día un disco en Nashville?

–Estaría muy bien grabar allí. Quique no defrauda, sus canciones son buenísimas y la colaboración de Al Perkins, que ha tocado con Dylan y los Stones, ni te cuento.

–Pereza contó con el ex rolling stone Mick Taylor a la guitarra en un par de canciones.

–Fue un subidón porque Taylor fue el guitarrista de los Rolling Stones en la época de los sesenta y setenta, cuando grabaron sus mejores discos. El tío ya estaba mayor pero cuando cogía la Les Paul y se hacía una nota sostenida marca de la casa, te dejaba flipando.

–¿Se sienten unos bichos raros en las galas de 40 Principales?

–Es un poco raro y te sientes como un pez fuera del agua. Tocar en directo y grabar discos lo hacemos gratis. Cobramos por hacer entrevistas e ir a galas de los 40 Principales (risas).

–Las pintas que se gastan ¿son pura impostura?

–Bueno lo de la ropa es nuestra forma de vestir de siempre. Te puedo asegurar que hace diez años era lo menos de moda que había. Ahora ves en los desfiles de Armani la colección rock y te partes.

–¿Resucitará a Buenas Noches Rose?

–Me vale con que la peña la recuerde como una buena banda.