Gran parte del conocimiento que existe sobre la cultura griega, la vida de sus gentes y sus costumbres, es gracias a los diferentes hallazgos arqueológicos realizados a lo largo de los años. Aun así, ciertos siglos de la historia de Grecia permanecen, en arqueología, todavía en la sombra ya que los estudios se han focalizado en otros momentos históricos. Grecia es casi todo clásico, helenismo y época romana. El Imperio Bizantino es casi un desconocido y a su investigación se ha dedicado un equipo de arqueólogos coruñeses, dentro de un proyecto con participación de las Universidades de Oxford y Santiago de Compostela.

Un grupo de arqueólogos coruñeses, pertenecientes a la empresa Argos de Servicios de Actividades Subacuáticas SL, ha llevado a cabo una campaña de exploración submarina de la isla griega de Skiathos, la más occidental de las Espóradas Septentrionales en el mar Egeo. Este proyecto, dirigido por el Departamento de Antigüedades Submarinas del Gobierno griego, forma parte de un desafío sobre proyectos internacionales llevado a cabo por los especialistas del equipo, quienes ya participaron en diversas excavaciones como las del puerto ptolemaico de Berenike en Egipto, el sondeo arqueológico de la costa de Libia y en los trabajos de localización de galeones españoles de la Carrera de Indias en las islas Azores.

El grupo está dirigido por los arqueólogos griegos Magdalini Athanasoula, Dyonisis Evangelistis y Athanasios Stergiou, comisionados por el ministerio, y compuesto por los arqueólogos y asesores de la Universidad de Oxford, Alkiviadis Ginalis, Katja Schörle, Ignacio Crespo, David Santos, David Fernández y Erik-Carlsson-Brandt, de la Universidade de Santiago de Compostela.

La historia de Bizancio es larga y compleja, grandes eventos marcaron su evolución desde colonia griega en la antigüedad a capital del Imperio Bizantino, por obra del emperador Constantino y con el nombre de Constantinopla, hasta su posterior caída a manos de los turcos otomanos, quienes le concedieron el nombre por el que es conocida en la actualidad, Estambul.

Las actividades de búsqueda se realizaron durante el pasado mes de mayo en la isla helena, y según uno de los arqueólogos del proyecto, Ignacio Crespo, los resultados obtenidos fueron más que satisfactorios. Todo apunta, dice, a que el producto de futuras campañas sea igual de bueno. "Tienen miles de kilómetros de costa con más de 7.000 años de historia de la navegación. Desde Micenas y la cultura cretense hasta la Época Moderna, y no son conscientes de las riquezas que se pueden encontrar", explica el investigador coruñés.

Las campañas de exploración supusieron la detección de pecios, fragmentos de naves que naufragaron, y de yacimientos sumergidos en los lugares más simbólicos de la isla, como el sitio donde se hundió la flota persa del rey Jerjes antes de la batalla de las Termópilas, contra los 300 espartanos del rey Leónidas. El equipo también realizó un levantamiento topográfico de diversas estructuras portuarias y costeras, y procedió a la localización de yacimientos terrestres, ambos con unas cronologías que van desde el período clásico hasta la Edad Media y el período Bizantino.

En el viejo puerto de Skiathos, cuya posición coincide con la del antiguo puerto bizantino, se localizaron unos imponentes esqueletos portuarios de antiguos diques que pondrían de manifiesto la importancia de la isla como punto de llegada en el intercambio comercial del Egeo. Allí se encontró una gran inscripción que identifica la creación de estas estructuras en época bizantina y que permanecía desaparecida desde 1837. También se localizaron un gran número de fragmentos de cerámica, principalmente secciones de ánforas, dos lámparas enteras de los siglos IV y VI, un fragmento de mármol decorado con cintas y dos vasos intactos del período postclásico.

Estas importantes señales predecirían unos resultados aun más excepcionales en las posteriores campañas que se realizarán a partir del año que viene. "Tanto la Universidad de Oxford como las autoridades griegas se han comprometido a continuar con el proyecto", aclaró Nacho Crespo, "además en las próximas campañas queremos ser más ambiciosos y ampliar el área de prospección a la costa de Tesalia, hacia toda la costa continental que está junto a la isla en la que trabajamos", añadió el arqueólogo.

El equipo tiene previsto seguir trabajando de forma intensiva en Skiathos varios años más, con el fin de arrojar un poco de luz, gracias al trabajo arqueológico subacuático, sobre la historia no contada de Grecia. "Con la continuación del proyecto tendremos la posibilidad de poder cambiar el concepto de la historia bizantina", declara el investigador coruñés.

Los resultados se presentarán oficialmente en la Universidad de Oxford a finales del mes de octubre, después de ser presentados previamente en Atenas, cuando finalicen los trabajos administrativos y los análisis en profundidad de los resultados obtenidos hasta ahora.