La firma del convenio entre Repsol y la Autoridad Portuaria para el comienzo del traslado a punta Langosteira de la actual terminal petrolera debía haber despejado incertidumbres que existían sobre este proceso y el desarrollo del puerto exterior, pero la negativa de los organizadores del acto a admitir preguntas de los periodistas y a facilitar el texto del convenio deja en el aire aún numerosas cuestiones que deben ser despejadas.
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