El Gobierno local mantiene el mismo discurso que cuando se iniciaron los registros en el Concello, máxima colaboración con la investigación para dilucidar si se ha cometido algún delito desde las oficinas municipales.

A falta de declaraciones del alcalde, Carlos Negreira, o del ahora imputado portavoz del Gobierno municipal, Julio Flores, el Concello se remite a unas frases pronunciadas por su edil de Urbanismo, Martín Fernández Prado, en un encuentro con la prensa esta mañana.

"Lo que pedimos a la juez es que, en la medida de lo posible, resuelva cuanto antes, porque el Ayuntamiento es el primer interesado en que todo se esclarezca", comentó Fernández Prado, que no quiso hablar de las imputaciones que se estaban produciendo tras el segundo registro que ordenó la juez De Lara en las dependencias municipales, hace apenas veinte días.

"Yo no tengo conocimiento de en qué consisten, son temas personales y no tengo la confirmación de esas noticias más allá de rumores", comentó el concejal de Urbanismo, que apeló a la prudencia para no hacer más declaraciones sobre las doce imputaciones que hacen que la operación Pokemon, extienda sus tentáculos también en A Coruña.

"Lo que tampoco queremos hacer son juicios previos que puedan dañar a gente que pudiese ser inocente", explicó Martín Fernández Prado.

Más contundente es la posición del BNG, que pide un cambio para los doce imputados. Los nacionalistas exigen que los concejales Julio Flores y el socialista José Nogueira dimitan y renuncien a sus actas, que los asesores y los altos cargos cesen en su actividad y que los funcionarios que han sido imputados en la operación Pikachu, esta pieza separada de la Pokemon, sean apartados de sus funciones y que no intervengan en ningún proceso administrativo de contrataciones.

El BNG le pide también al alcalde, Carlos Negreira, que comparezca "de inmediato" para explicarle a los vecinos "todos los detalles" de unas imputaciones que, a su juicio, "dañan gravemente la imagen del Concello de A Coruña". Los nacionalistas exigen también "transparencia" al Gobierno local.

El discurso del Partido Popular de A Coruña, comandado por el alcalde Carlos Negreira, es muy similar al que defiende el Ayuntamiento. La formación asegura que respeta los procesos judiciales y, como el Gobierno local, urge a la magistrada a "resolver cuanto antes" el caso. El PP se escuda en que defiende "la independencia judicial y también la presunción de inocencia".

"Hay que dejar hablar a la Justicia y que se depuren las responsabilidades si las hubiera", señalaron ayer las mismas fuentes del Partido Popular coruñés.