El Ayuntamiento envió su recurso de alzada a la Xunta a principios de agosto firmado por la edil de Medio Ambiente, María García, y lo matizó a finales de ese mismo mes en otro escrito remitido por el alcalde, Xulio Ferreiro. En su carta, el regidor solicitó, a instancias de un informe de la asesoría jurídica municipal, que la Consellería de Medio Ambiente considerara retirado de la alegación el párrafo en el que el Ayuntamiento diferenciaba entre la "obligación de la obra de sellado" y "quién debe pagar tales obras", por ser una "cuestión ajena a la Administración autonómica ya que debe ser abordada por el Ayuntamiento y la empresa en el marco de sus relaciones contractuales". El alcalde retiró esa mención por ser "totalmente ajena a la resolución impugnada" y corresponder a una "relación concesional" entre Ayuntamiento y empresa "sobre la que la Consellería de Medio Ambiente no tiene competencias".