El tráfico en la avenida de Alfonso Molina aumentará un 4,5% en su tramo más conflictivo, el que discurre entre el acceso al Pocomaco y el de la Universidad, cuando esté concluida la ampliación de carriles, de acuerdo con las previsiones realizadas por el Ministerio de Fomento en el proyecto que se encuentra sometido a información pública, en el que se calcula que la obra estará terminada en 2020. La elevada intensidad de circulación que soporta ese vial y la estimación de que crecerá más en los próximos años fue el argumento empleado por el ministerio para poner en marcha un aumento del número de carriles entre Ponte da Pedra y el acceso a la autopista.

En los otros dos tramos estudiados por Fomento para efectuar un pronóstico del crecimiento de la circulación los resultados son dispares, ya que entre la Fuente de las Pajaritas y el acceso a Pocomaco crecerá un 6,1%, mientras que desde el vial al campus y la entrada a la AP-9 será de un 4,3%. La intensidad media diaria de tráfico en el recorrido de Alfonso Molina que será ampliado refleja que el tramo entre el acceso a Pocomaco y el de la Universidad, al que se denomina enlace central, era de 135.126 vehículos, mientras que para 2020 se estima que serán 141.239, un 4,5% más.

Ese tramo es donde se concentra un mayor número de accidentes y retenciones debido a la coincidencia de la salida de la autopista y el enlace a Pocomaco y Matogrande en el sentido de entrada. En el de entrada se encuentran también el segundo de esos accesos, además del de la Universidad, que dificultan el paso de quienes se dirigen hacia la AP-9. El mayor crecimiento estimado del tráfico se producirá, según el estudio realizado, entre la Fuente de las Pajaritas y el acceso a Pocomaco, donde se alcanzarán los 133.074 vehículos al día. En el que discurre entre el desvío a la Universidad y el de la AP-9, el segundo en intensidad ahora, el aumento llegará hasta los 131.728 vehículos.

El estudio calcula también la previsión de tráfico para 2040, veinte años después de que supuestamente se haya ampliado la avenida, que ofrece unos datos de un considerable incremento de la intensidad, ya que en el tramo más conflictivo se estima que llegará a los 187.124 vehículos, lo que supondría un crecimiento del 38,4%. Fomento no aporta ninguna posible solución a ese problema, ya que no sería posible aumentar una vez más la anchura de la avenida. La previsión corrobora además el argumento empleado por el Gobierno local para oponerse a la ampliación, basada en que solo generará un aumento del tráfico.