El avión que cubría ayer por la tarde la ruta entre A Coruña y Londres sufrió un problema en su radar que le obligó a desviarse para aterrizar en el aeropuerto de Orly, en Parísavión A Coruña Londres problema radar OrlyParís, donde tomó tierra sin complicaciones y de forma segura pasadas las nueve de la noche, según informó Vueling. El piloto lanzó el aviso de emergencia cuando la aeronave sobrevolaba la isla francesa de Jersey, en el Canal de la Mancha, y tras consultar la situación con la torre de control del aeropuerto londinense de Heathrow desvió la ruta hacia el interior del continente. El avión volaba con 175 pasajeros a bordo, según la aerolínea.

Al problema surgido en el radar se unió, añaden fuentes de Vueling, el denso tráfico aéreo y las malas condiciones meteorológicas en Londres. Estos tres factores llevaron a la torre de control de Heathrow a indicar al piloto de Vueling que buscara un aeropuerto alternativo para el aterrizaje, explicó la compañía. La opción escogida fue Orly, en París.

Vueling buscó anoche alojamiento en la capital francesa para los 175 pasajeros afectados, que serán hoy reubicados de dos formas para poder llegar a su destino en Londres. Una será de manera directa desde otro aeropuerto parisino, el Charles de Gaulle; la otra, vía Roma, desde la terminal de Fiumicino. El avión de Orly sí regresó antes de la medianoche a A Coruña, desde donde hoy tiene que dirigirse a otro destino.

El desvío del avión de ayer, con hora de salida de desvío avión Alvedro a las 18.15, provocó que Vueling cancelase el vuelo de regreso desde Heathrow a A Coruña en la misma aeronave, que debía aterrizar en la terminal coruñesa a las 23.30 horas; lo hizo desde Orly.

En redes sociales, pasajeros del vuelo aseguraban ayer que el desvío se debió a "problemas técnicos" y que los viajeros habían sido trasladados a la terminal de Orly. El problema en el radar impidió -explican desde la compañía- que el aterrizaje se pudiera realizar de forma automática; ante la emergencia, tendría que haberse hecho mediante comunicación directa del piloto con los controladores de Heathrow. Pero la mala meteorología sobre el sur de Inglaterra y el tráfico denso a esa hora en el aeropuerto aconsejó la elección de otra terminal en la que tomar tierra.

La emergencia motivada por la avería no causó incidencias durante el vuelo, como movimientos bruscos de la aeronave o situaciones de riesgo para los viajeros, confirma Vueling. El aterrizaje que finalmente se realizó en Orly fue "normal". El pasaje, ahora repartido en dos vuelos, llegará con medio día de retraso a Londres.